Aspecto general del Centro Histórico de Quito después de los enfrentamientos entre manifestantes y la Policía el 9 de octubre del 2019. Foto: Armando Prado / EL COMERCIO
Las calles empedradas del Centro Histórico de Quito que resultaron afectadas durante las protestas por la eliminación del subsidio a los combustibles entraron a un proceso de rehabilitación de parte del Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP).
Este Diario hizo un recorrido en la zona y constató que se interviene en las calles García Moreno, Galápagos, Benalcázar, Manabí, Olmedo, Chimborazo, Mideros y Carchi. Según esa entidad, las rocas de esas vías fueron desprendidas.
Los obreros las retiraban con picos y palas. También quitaban el asfalto que fue colocado encima. El objetivo es reforzar las bases para ubicarlas nuevamente. Técnicos del IMP monitoreaban el trabajo.
En las investigaciones, se estableció que las piedras fueron traídas de las faldas del Pichincha y talladas de forma artesanal en siglos pasados. “Se recuperaron 45 piedras que tradicionalmente forman parte de las calles del Centro Histórico”.
También se realiza la restauración de aceras que están revestidas con el adoquín tipo Quito, denominación que se dio por el uso exclusivo en la capital y son parte de la ornamentación urbana.
Como parte de la restauración, el IMP cuenta con material almacenado en las bodegas para la recuperación de las calzadas que suman aproximadamente 500 metros cuadrados. El trabajo tomará unos 120 días aproximadamente.
Además, fuera del perímetro del Centro Histórico, se intervendrá en las vías Matovelle (sector San Juan), Solano y López del barrio El Dorado.