Venezuela promulgó hoy, 19 de julio del 2016, una ley que prohíbe a detenidos procesados o penados el uso de telefonía celular y acceso a internet dentro de los centros penitenciarios del país, como una medida para prevenir la comisión de delitos desde el interior de las cárceles.
“Esta Ley tiene por objeto prevenir que desde el interior de los establecimientos penitenciarios del país se ejecuten delitos a través de la utilización de la telefonía celular, la Internet y, en general, de todos los servicios de voz y datos que ofrecen las compañías de telecomunicaciones”, señala la ley promulgada en la Gaceta Oficial.
La norma, que fue aprobada y discutida por el Parlamento venezolano, controlado por los opositores al Gobierno, regirá en todos los centros penitenciarios del país “destinados a procesados judiciales o a penados, así como también en los que coexistan procesados con penados”.
La ley obliga a que las autoridades penitenciarias instalen en las cárceles equipos de inhibición de la señal de telefonía e internet, asimismo deberán instalar teléfonos públicos que garanticen la comunicación de los presos.
Igualmente establece castigos de prisión de tres hasta cinco años para quienes faciliten tecnología de comunicación a presos, y de cuatro a seis años si quien facilita esas herramientas es un funcionario.
El Parlamento venezolano ha señalado que desde las cárceles del país se planifican y ordenan secuestros, robos y otros crímenes, y que los reclusos portan potentes armas de fuego como se ha demostrado en videos que los mismos presos se han encargado de difundir.
La Cámara inició una investigación a finales de enero sobre los penales venezolanos luego de que en una cárcel del oriente del país los presos realizaran un homenaje póstumo a un líder delincuente asesinado usando armas de guerra, imágenes que fueron difundidas en las redes sociales.