Los países del Consejo de Derechos Humanos de la ONU hablaron sobre los derechos humanos en Venezuela. Foto: Twitter HRC Secretariat
Solo 14 países apoyaron, este martes 6 de octubre del 2020, una resolución a favor del presidente venezolano Nicolás Maduro. De los 47 países que conforman el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, apenas siete la rechazaron, entre ellos Perú, Australia, Brasil, Chile y Uruguay.
En cambio, la gran mayoría (26) decidió abstenerse, como Argentina, cuyo giro sorprendió porque, bajo las administraciones kirchneristas-peronistas, ha sido muy cercano al Gobierno bolivariano.
Los países que decidieron respaldar al Gobierno en Venezuela, presidido por Nicolás Maduro, son Angola, Burkina Faso, Camerún, Nepal, Namibia, México, Indonesia, Fiyi, Eritrea, Pakistán, Filipinas, Catar, Sudán y Venezuela.
El documento fue elaborado por Irán, Siria, Turquía y Venezuela. En él se afirma que en Venezuela hay progresos notables en el respeto de los derechos humanos en el país y pidió que se mantenga la oficina del Alto Comisionado, liderado por la chilena Michelle Bachelet. Sin embargo, la delegada de Perú dijo que en el país la Comisión solo tiene dos representantes de Bachelet en Caracas y su acceso a información y movilización es limitado.
La representante de Brasil dijo que la resolución era un “irrealismo fantástico” de los que cometen violaciones a los derechos humanos.
“Nuestros países lamentan la cooperación estrecha y selectiva de las autoridades con el sistema de derechos humanos de las Naciones Unidas, que no aborda la gravedad de las violaciones de derechos humanos documentadas tanto por la alta comisionada como por la Misión de Determinación de Hechos ni la crisis humanitaria”, expresó.
El Consejo de Derechos Humanos está discutiendo -y debe votar entre hoy y mañana- una resolución para que se siga investigando al país y los delitos de lesa humanidad cometidos por el Gobierno de Maduro, por al menos dos años más de la Misión de Determinación de Hechos. Se condena los que han sido denunciados, al menos 1 300 muertes por parte de la Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), que Bachelet pidió que se desmantelara. Y se pedirá elecciones libres, transparentes y justas.