El miembro del Tribunal Supremo, Francis Jardeleza, muestra una copia de la decisión a Corte Permanente de Arbitraje de La Haya (CPA) a favor de Filipinas en el conflico territorial con China. Foto: EFE
La alta representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Federica Mogherini, instó el 15 de julio a China y Filipinas a solucionar “por medios pacíficos” su disputa sobre islas en el mar de China Meridional tras la sentencia que dio la razón a Manila.
Mogherini dejó claro, en un comunicado, que la UE “no se posiciona” sobre aspectos de soberanía se este caso, y expresó la necesidad de que las partes “resuelvan la disputa por medios pacíficos”, a fin de clarificar sus demandas y que las persigan “con respeto y de acuerdo a la ley internacional”.
El 12 de julio la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya (CPA) emitió su fallo en el que respaldó las reivindicaciones de Filipinas.
Mogherini destacó que la UE y sus Estados miembros, como partes de la Convención de Naciones Unidas sobre la Ley del Mar (UNCLOS), reconocen la sentencia y están “comprometidos con el mantenimiento del orden legal en los mares y océanos” basado en los principios de la ley internacional y de la “pacífica resolución de disputas”.
Recordó que los mecanismos de resolución de disputas bajo la UNCLOS “contribuyen a mantener y ampliar el orden internacional basado en el Estado de derecho” y son “esenciales para solucionar conflictos”.
En ese contexto, destacó especialmente la importancia “fundamental” de atenerse a las libertades de navegación y sobrevuelo.
La política italiana también instó a las partes a evitar actividades “que puedan elevar la tensión” y aseguró que la UE está dispuesta a facilitar acciones que incrementen la confianza entre ellas.
La CPA anunció su fallo sobre el conflicto territorial del mar de China Meridional el 12 de julio tras más de tres años de proceso judicial, iniciado en enero de 2013 cuando Filipinas presentó una denuncia al considerar que China había empezado a ocupar territorios pertenecientes a la zona económica exclusiva filipina.
La disputa entre Manila y Pekín gira entorno al atolón de Scarborough y a parte de las islas Spratly, un grupo de más de 750 arrecifes, islotes, atolones y cayos cuya soberanía reclaman también total o parcialmente Brunei, Malasia, Taiwán y Vietnam.
La tensión en el mar de China Meridional ha aumentado en los últimos años por culpa de altercados, acusaciones cruzadas entre los gobiernos reclamantes y un aumento de la presencia militar en la zona por parte del Ejército chino.
