Los manifestantes con chalecos amarillos ondean la bandera no oficial de Cataluña utilizada por el movimiento de independencia y las banderas regionales francesas en los Campos Elíseos en París este 16 de marzo de 2019, durante el 18° sábado consecutivo de manifestaciones convocadas por el movimiento “Chaleco Amarillo” (gilets jaunes ). Foto: AFP
Un grupo de agitadores saqueó este sábado, 16 de marzo del 2019, tiendas de la famosa avenida de los Campos Elíseos en París, durante el 18º día de movilización de los “chalecos amarillos”, marcado por un nuevo brote de violencia.
Miles de “chalecos amarillos” se congregaron en la emblemática arteria, donde al mediodía ardían varias barricadas.
Mientras, algunos grupos coreaban lemas anticapitalistas o antipoliciales, otros atacaban tiendas (Hugo Boss, Lacoste, Nespresso…) y restaurantes como el famoso Fouquet’s, frecuentado por famosos.
Junto al Arco de Triunfo, grupos de manifestantes, muchos de ellos vestidos de negro y con capucha o casco en la cabeza, lanzaban adoquines a las fuerzas de seguridad, que respondían con gases lacrimógenos.
Los manifestantes con chalecos amarillos volvieron a manifestarse en las calles de las ciudades francesas este 16 de marzo del 2019, durante en contra de las políticas del presidente francés Macron y su estilo de gobierno, el alto costo de la vida, las reformas fiscales del gobierno y por más “justicia social y económica”. Sin embargo, también hubo saqueos a las tiendas de los Campos Elisios en París. Foto: AFP
En la foto un scooter en un escaparate roto cuando los manifestantes con chalecos amarillos se enfrentan con las fuerzas de la policía antidisturbios en los Campos Elíseos de París este 16 de marzo de 2019. Foto: AFP
Según imágenes difundidas por las televisiones, otro grupo trató de atacar un camión de la gendarmería.
Según un balance divulgado por la policía a media mañana, 31 personas fueron detenidas.
Hacía semanas que no se veían en París escenas de saqueos y enfrentamientos como estas, que recuerdan a las que se registraron en los mismos Campos Elíseos a finales de noviembre y principios de diciembre y cuyas imágenes dieron la vuelta al mundo.
El ministro del Interior, Christophe Castaner, denunció las acciones de “profesionales del destrozo y del desorden” y pidió a la policía que responda “con la mayor firmeza”.
Según cifras comunicadas por el ministro, unos 7 000 a 8 000 personas se manifestaban el sábado en la capital francesa este sábado, entre ellos 1 500 ultraviolentos.
‘Macron, ¡vamos por ti!’
Las fuerzas de seguridad estaban fuertemente movilizadas en la capital en el 18º sábado consecutivo de manifestaciones de “chalecos amarillos” contra la política fiscal y social del gobierno francés.
El centro de París amaneció con estaciones de metro cerradas y escaparates protegidos en previsión de una mayor movilización al cumplirse cuatro meses del inicio de las protestas.
“¡Nos desmovilizamos un poco la semana pasada pero no estamos muertos! Macron, ¡vamos por ti!” , dijo Murielle, una “chaleco amarillo” que participaba en una marcha que salió del noroeste de París.
Varias figuras de este movimiento apolítico que se organiza en las redes sociales invitaron a sus simpatizantes a converger en la capital.
“Esperamos a los de Toulouse con impaciencia, los de Burdeos, los de Marsella…” , dijo el camionero Eric Drouet, uno de los líderes de los “chalecos amarillos”, quien dijo esperar también refuerzos de Italia, Bélgica, Holanda y Polonia.
Maxime Nicolle, otro miembro destacado, prometió un día “memorable” , “un fin de semana entre los más importantes desde el inicio de esta movilización”.
Presentada como un “ultimátum” al presidente Macron, esta nueva movilización se produce tras una serie de debates en Francia con los que el gobierno esperaba canalizar la ira de los manifestantes y hacer emerger propuestas concretas.
Fuerte dispositivo policial
El número de manifestantes decayó en las últimas semanas. Según cifras del Ministerio del Interior -que los “chalecos amarillos” cuestionan- fueron 28.600 en toda Francia la semana pasada, una décima parte de los 282 000 que salieron a la calle el 17 de noviembre, fecha en que se inició el movimiento.
Las fuerzas del orden habían previsto un fuerte dispositivo de seguridad.
Una fuente policial interrogada dijo que había “ muchos factores que hacían pensar que la movilización de hoy podría ser superior a la de los sábados anteriores ”, sobre todo por la presencia de grupos ultraviolentos.
Unos 5 000 hombres y seis vehículos blindados de la gendarmería estaban desplegados en la capital, donde había convocadas también otras manifestaciones como la llamada “ Marcha del siglo” por el clima.