La policía fronteriza afgana logró detener el ataque suicida de una niña de diez años que portaba un chaleco con explosivos, informaron hoy, lunes 6 de enero de 2014, fuentes policiales.
La niña fue detenida el domingo en el distrito de Khanshin, en la provincia de Helmand.
“Estaba confundida y asustada”, dijo un funcionario local. De acuerdo con las primeras investigaciones el hermano de la pequeña la había obligado a cometer este ataque, agrega la fuente.
En el pasado, las milicias talibán han utilizado a niños como terroristas suicidas. Hace un año, el presidente afgano, Hamid Karzai, perdonó a varios niños que habían intentado cometer ataques suicidas.