El papa Francisco, que estuvo ausente en todos los ritos de la Semana Santa al seguir convaleciente tras su hospitalización, apareció este Domingo de Pascua, 20 de abril de 2025, para dar la bendición ‘Urbi et Orbi‘.
Después, recorrió la plaza en papamóvil y compartió un mensaje en contra de la guerra a los feligreses.
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Papa Francisco reapareció para dar la bendición de Pascua ‘Urbi et Orbi’
Francisco no ha participado en ninguno de los ritos de la Semana Santa debido a que sigue recuperándose tras haber pasado 38 días en el hospital por una neumonía bilateral; fue dado de alta el 23 de marzo.
El pontífice argentino, que permaneció sentado en la silla de ruedas y no llevaba las cánulas nasales para el oxígeno, deseó: “Buena Pascua” y pidió al maestro de ceremonias, Diego Ravelli, que leyese el mensaje ante unas 50 000 personas congregadas en la plaza de San Pedro para la misa del Domingo de Resurrección, que fue oficiada por el cardenal Angelo Comastri.
Posteriormente, por sorpresa, el papa recorrió la plaza de San Pedro en papamóvil durante varios minutos e incluso detuvo el vehículo para bendecir a algunos niños, aunque se le notaba con dificultad en los movimientos.
La aparición de Francisco este domingo fue la más relevante desde su salida del hospital.
Durante la mañana, también recibió al vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, en su residencia de casa Santa Marta, para un breve saludo, informó la oficina de prensa del Vaticano.
¿Qué es la ‘Urbi et Orbi’?
La ‘Urbi et Orbi’ es una bendición solemne impartida por el papa, generalmente en ocasiones especiales como Pascua, Navidad o tras su elección.
Se dirige a los fieles presentes en la Plaza de San Pedro y a los que la siguen por medios de comunicación, otorgando indulgencia plenaria bajo ciertas condiciones. Es un acto de gran significado espiritual y universal en la Iglesia Católica.
Esta frase significa “a la ciudad y al mundo” en latín.
Condena al rearme
En el tradicional mensaje de Pascua, en el que hace mención de los conflictos y males del mundo, el papa lamentó: “Cuánta voluntad de muerte vemos cada día en los numerosos conflictos que afectan a diferentes partes del mundo. Cuánta violencia percibimos a menudo también en las familias, contra las mujeres o los niños. Cuánto desprecio se tiene a veces hacia los más débiles, los marginados y los migrantes”.
Y rechazó “la carrera general para el rearme” e instó “a usar los recursos disponibles para ayudar a los necesitados, combatir el hambre y promover iniciativas que impulsen el desarrollo”.
“La paz tampoco es posible sin un verdadero desarme. La exigencia que cada pueblo tiene de proveer a su propia defensa no puede transformarse en una carrera general al rearme”, aseveró Francisco.
Crisis humanitaria en Gaza y antisemitismo
“Quisiera que volviéramos a esperar en que la paz es posible”, deseó el papa antes de empezar a enumerar los conflictos en el mundo en un nuevo duro mensaje.
Expresó su preocupación por “el creciente clima de antisemitismo que se está difundiendo por todo el mundo” y también por “la comunidad cristiana de Gaza, donde el terrible conflicto sigue llevando muerte y destrucción, y provocando una dramática e indigna crisis humanitaria”
Apeló “a las partes beligerantes: que cese el fuego, que se liberen los rehenes y se preste ayuda a la gente, que tiene hambre y que aspira a un futuro de paz”.
En otro pasaje de su mensaje, aunque sin hacer referencia a la guerra en Gaza, Francisco criticó los ataques a hospitales y operadores humanitarios.
También instó a rezar “por las comunidades cristianas del Líbano y de Siria, así como por Yemen, “que está viviendo una de las peores crisis humanitarias prolongadas” del mundo a causa de la guerra”, e invitó “a todos a buscar soluciones por medio de un diálogo constructivo”.
Guerra de Ucrania
Francisco también pidió “que Cristo resucitado infunda el don pascual de la paz a la martirizada Ucrania y anime a todos los actores implicados a proseguir los esfuerzos dirigidos a alcanzar una paz justa y duradera”.