El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas impuso ayer nuevas sanciones contra Irán por su programa nuclear con el que las potencias occidentales sospechan que la República islámica busca fabricar armamento atómico. La resolución aprobada -por 12 votos a favor, el voto contrario de Brasil y Turquía, y la abstención del Líbano- es el resultado de cinco meses de negociaciones entre EE.UU., Gran Bretaña, Francia, Alemania, China y Rusia. Se trata de la cuarta tanda de sanciones desde el 2006, como parte del esfuerzo internacional para que las autoridades de Teherán suspendan parte de sus actividades nucleares.Las diplomacias de Brasil y Turquía habían logrado a mediados de mayo un acuerdo con Irán, para la manipulación del uranio, pero este fue desechado por Estados Unidos y sus aliados. Las cuatro potencias occidentales del Consejo (EE.UU. Alemania, Gran Bretaña y Francia) habían buscado sanciones mucho más severas -algunas de ellas apuntando al sector energético de Irán- pero Pekín y Moscú trabajaron duro para suavizar las medidas propuestas en el documento de 10 páginas. “Este consejo ha estado a la altura de sus responsabilidades. Ahora Irán debe escoger un camino más prudente”, dijo al consejo la embajadora estadounidense, Susan Rice, tras la votación. “Irán no suspendió de manera plena y prolongada las actividades relacionadas con el enriquecimiento de uranio”, se lee en el texto de la resolución.Ese país niega las acusaciones occidentales de que esté buscando desarrollar armamento atómico e insiste en que su programa de enriquecimiento de uranio solo tiene fines pacíficos. El presidente iraní Mahmud Ahmadinejad reaccionó con desdén ante la decisión de la ONU. “Estas resoluciones no tienen valor (…) Es como un pañuelo usado que debe arrojarse a un tarro de basura”, afirmó a los periodistas durante una visita a Tayikistán.Mientras el Embajador iraní ante el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Ali Asghar Soltanieh, en Viena, informó que “las actividades de enriquecimiento no se suspenderán ni por un segundo”. “No importa cuántas resoluciones se aprueben, continuaremos con el enriquecimiento de uranio”, agregó. Para el presidente estadounidense, Barack Obama, las sanciones para Irán aprobadas por el Consejo de Seguridad envían el “mensaje inequívoco” de que la comunidad internacional no permitirá a Irán desarrollar armas nucleares.El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, calificó de “victoria pírrica” a la resolución. Durante una visita a Natal (noreste de Brasil), afirmó: “Es un episodio que debilita el Consejo de Seguridad, que representa la misma correlación de fuerzas que en 1948, cuando fue creado”.