Fotografía del 19 de abril de 2016 de la obra de la Villa Olímpica RÍO 2016 hecha por la constructora Odebrecht en la ciudad de Río de Janeiro, Brasil. Foto: EFE
La gigante brasileña Odebrecht se adjudicó cerca de USD 450 millones en 25 proyectos de construcción en el Perú durante el Gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000), según un informe del Congreso que publicó este lunes 9 de enero el diario local ‘La República’.
Odebrecht, cuyos sobornos por USD 29 millones pagados a funcionarios peruanos entre 2005 y 2014 para adjudicarse millonarias obras están siendo investigados por la Fiscalía, fue la empresa que más contratos firmó con el Estado peruano durante la década de 1990.
Para los expertos, esa documentación es suficiente para que las indagaciones en el Perú vayan más allá de los sobornos reconocidos que alcanzan a los gobiernos de Alejandro Toledo, Alan García y Ollanta Humala. “(Las empresas brasileñas) han tenido una relación muy importante con el Gobierno de Fujimori y no hay razón para creer que ha sido distinta con García, Toledo y Humala. El patrón de Odebrecht ha sido siempre tener buenas relaciones con los gobiernos de turno de los países donde ha operado”, dijo el politólogo brasileño Iván Martínez-Vargas al diario.
Desde su llegada al Perú en 1979, Odebrecht ha ejecutado proyectos por unos USD 12 000 millones, por lo que se considera que el monto real de sobornos es mucho mayor.
Actualmente, la gigante brasileña mantiene cinco concesiones:el gaseoducto Sur Peruano, Rutas de Lima, el proyecto de irrigación Chavimochic, la carretera Interoceánica Norte y Sur y la hidroeléctrica Chaglla.
El representante de Odebrecht en el Perú, el brasileño Mauricio Cruz, detalló que darán un paso al costado en el proyecto del gaseoducto que permanece paralizado y que espera que el resto de obras se termine para “evitar una gran pérdida para todos”.
Cruz aseveró que no es necesario que la Fiscalía intervenga a la empresa por que está, en forma voluntaria, se comprometió a entregar información.”Un embargo de nuestras cuentas implicaría que no podamos pagar los sueldos de nuestros 10 000empleados ni a nuestros acreedores. Solo queremos la comprensión de todos para cumplir nuestras obligaciones”, sostuvo.
El escándalo, que salpica a varios países de América Latina, estalló en diciembre cuando la Justicia de Estados Unidos reveló que Odebrecht reconoció haber pagado USD 788 millones a lo largo de 15 años desde 2001, en sobornos para conseguir la adjudicación de contratos.