Fotografía cedida por el Ministerio Público de Perú del proceso de allanamiento a la casa del expresidente de Perú Alejandro Toledo el sábado 4 de febrero de 2017, en Lima (Perú). EFE
La fiscalía del Perú formalizó el lunes 6 de febrero de 2017, la apertura de una investigación preliminar contra el expresidente Alejandro Toledo por presuntos tráfico de influencias y lavado de activos, según anunció el organismo en la red social Twitter (@FiscaliaPeru).
La investigación deriva de testimonios y evidencias que apuntan a que Toledo presuntamente cobró un soborno de USD 20 millones a la firma brasileña Obdebrecht para adjudicarle un contrato de obra cuando era presidente (2001-2006). La investigación incluye al empresario israelí Josef Maiman, íntimo amigo del ex mandatario y supuesto orquestador del soborno, y al encarcelado ejecutivo brasileño Jorge Barata, exrepresentante de Odebrecht en Lima.
Según la prensa, tras la apertura formal de la investigación es probable que el fiscal del caso, Hamilton Castro, solicite una audiencia con el juez encargado, Richard Concepción, para pedirle una orden de captura de alcance internacional con miras a extradición.
Toledo, que vive en Estados Unidos, está ahora en Francia, desde donde se ha declarado perseguido yha dicho que está dispuesto a colaborar con una “Justicia justa”, pero sin aclarar si piensa regresar voluntariamente al Perú. El mayor escándalo hasta ahora porel caso Odebrecht en el Perú estalló el viernes, cuando se reveló que Barata, ahora “colaborador eficaz”, afirmó que su empresa le pagó USD 20 millones a Toledo para realizar dos tramos de la vía Interoceánica, que une al Pacífico con el Atlántico a través del Perú y Brasil.
Los dichos de Barata coinciden con pesquisas realizadas por las fiscalías de Brasil y Perú, según trascendidos, por lo que la situación del ex mandatario centrista de 70 años es complicada.
Según el testigo, el entonces presidente peruano aprovechóuna reunión del Grupo de Río en 2004 en Brasil para solicitar 35 millones de dólares a través de su jefe de seguridad, el israelí Avi Dan On. Posteriores encuentros permitieron supuestamente acordaron los 20 millones de dólares, canalizados sobre todo a través de empresas ‘offshore’ establecidas por Maiman, cuyo paradero es desconocido.
El alegato de Toledo de que todo obedece a una persecución de sus enemigos fue desestimado incluso por exseguidores,que le piden regresar al país y afrontar las consecuencias. El presidente, Pedro Pablo Kuczynski, quien fue sujefe de gabinete ministerial, lo acusó de traicionar al país.
Para expertos, la pena para Toledo, segúnlos cargos que se le imputen y se le prueben, podría ser entre ocho y 30 años de cárcel. El escándalo Odebrecht estalló en noviembre en el Perú,al igual que en otros países de América Latina y África, cuando la empresa brasileña reconoció los pagos ilícitosen el marco de un acuerdo de colaboración con la Justicia de Estados Unidos.
En el caso del Perú, Odebrecht dijo haber pagado USD 29 millones de 2005 a 2014, lapso que comprende los gobiernos de Toledo, Alan García (2006-2011) y Ollanta Humala (2011-2016)., según anunció el organismo en la red social Twitter.