Miguel Piñera, hermano del presidente de Chile, fue acusado de violencia intrafamiliar y consumo excesivo de drogas y alcohol en una demanda de divorcio presentada por su esposa, la modelo argentina Belén Hidalgo.
Entre varios episodios relatados por la mujer en la demanda, publicada hoy por el sitio Cambio 21, se destaca uno ocurrido en el palacio presidencial Cerro Castillo, en Viña del Mar, 150 kilómetros al noroeste de Santiago, de uso exclusivo para mandatarios.
“Mi miedo hacia él era de tal magnitud, ya que me perseguía por la casa (Cerro Castillo) gritándome que me iba a matar, que me pegaría, por lo que me escondí debajo de la cama de la pieza (habitación) de servicio. Cuando él se durmió saqué mis cosas y me vine a Santiago, aterrada”, relató Hidalgo.
La modelo recordó otro episodio de violencia, ocurrido en el casino de juegos Enjoy de Viña del Mar:
“Me pegó una patada en el estómago”, aseguró.
En la demanda de divorcio, Hidalgo solicitó una compensación económica por 700 mil dólares, pero las partes cerraron un acuerdo pre-judicial por 200 mil dólares.
El quiebre definitivo de la pareja se confirmó en abril de 2011, luego de varios rumores de celopatía, violencia y consumo excesivo de alcohol y drogas por parte de Piñera.
Pocos días después de la ruptura, el hermano menor del mandatario, y su protegido, fue internado “a la fuerza” en una clínica de rehabilitación, según denunciaría más tarde.