Macri reiteró su confianza en que la situación económica de Argentina mejore en los próximos meses. Foto: EFE
El presidente argentino, Mauricio Macri, fijó como principal objetivo de su gestión reducir el nivel de pobreza y aseguró que si no lo logra al término de su mandato, habrá “fracasado”.
Macri afirmó que quiere que su gobierno sea juzgado por la evolución del nivel de pobreza. “Si cuando termino mi presidencia no bajé la pobreza, habré fracasado, más allá de las cosas que hayamos obtenido. Todo lo demás serían excusas. Y la pobreza medida en forma independiente”, declaró en Alemania en una entrevista que publican el 7 de julio los diarios “La Nación” y “Clarín”.
Según un informe de la Universidad Católica Argentina (UCA) difundido el 7 de julio, el 40 por ciento de los menores de 0 a 17 años vivían a fines de 2015 en la pobreza en Argentina.
Por otra parte, evitó referirse a las investigaciones judiciales que involucran a su antecesora, la expresidenta peronista Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), quien denunció que sufre una persecución judicial.
“Me estoy manteniendo al margen de la tarea de un sistema judicial independiente”, aseguró el político, que llegó al poder al frente de la coalición Cambiemos, de centroderecha.
“En seis meses se han visto más intentos de terminar con la impunidad que en más de 12 años. Este gobierno ha generado un ámbito para que los periodistas trabajen con absoluta libertad, para que la Justicia trabaje con absoluta libertad, para que vuelva el diálogo y para que se abra la Argentina al mundo”, sostuvo. “Acá todos tienen que saber que no hay más impunidad. Eso incluye a los jueces, los empresarios, los sindicalistas, los políticos, los periodistas… Todo el mundo tiene que entender que tiene que cumplir con la ley. Sin excepciones. Ésa es una sociedad civilizada”, subrayó.
Macri reiteró en tanto su confianza en que la situación económica de la Argentina mejore en los próximos meses.
“Prometí que en el segundo semestre iba a bajar la inflación, que iba a avanzar la obra pública y que iban a llegar inversiones, pero no es automático”, aclaró el mandatario, que aspira que el programa de blanqueo de capitales que impulsó su Gobierno atraiga “una cifra superior a los USD 25 000, 30 000 millones” que permitirá a la Argentina financiar “su gradual reducción de inflación”. “Y eso nos va a permitir que el sector privado por primera vez tenga acceso a crédito de largo plazo y a tasas sumamente bajas. Nos retiraríamos del mercado de crédito y eso nos permitiría que todo el crédito de la Argentina vaya para el sector privado. Insisto, va a producir una corriente de financiamiento inédita en nuestra historia”, remarcó.
Por otra parte, el presidente argentino destacó las conversaciones que mantuvo en su gira europea para acelerar las negociaciones de un tratado de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea, pese a la resistencia al ingreso de productos agrícolas sudamericanos en el Viejo Continente. “El planteo claramente es: ellos tienen serias ventajas en todo lo que es el aparato industrial, fabricación de bienes y servicios. Nosotros tenemos ventajas en el sector agrícola. Entonces todo tiene que estar sobre la mesa para buscar balances y equilibrios”, subrayó.
El principal resultado del viaje fue recibir “mucha mejor predisposición de lo que se veía desde Argentina, pensando que el “Brexit” paralizaba todo y no es así”. “Tanto en París como en Bruselas, como acá en Berlín, escuchamos definiciones que están más en línea a lo que nosotros pensamos. Justamente la mejor manera de consolidar la Unión Europea, la relación entre bloques, el intercambio es avanzar en esta oportunidad que tenemos que es culturalmente tan cercana, no? Porque finalmente América Latina principalmente deviene de un vínculo con Europa”, destacó el presidente.