Imagen referencial. El ejecutivo habría sido envenenado por un exdirectivo chino. Foto: Pixabay
El magnate chino de los videojuegos Lin Qi murió el día de Navidad tras ser supuestamente envenenado por un directivo de la subsidiaria cinematográfica de su compañía Yoozoo Games, informa este martes 29 de diciembre el portal de noticias local Sixth Tone.
Lin, de 39 años y consejero delegado de la citada empresa, fue hospitalizado el pasado miércoles, cuando la Policía de Shanghái (este) detuvo a un compañero de trabajo de 39 años llamado Xu, sospechoso de haberle envenenado.
Según fuentes del sector citadas por el diario digital privado Caixin, el arrestado es Xu Yao, un antiguo directivo de Yoozoo que actualmente estaba encargado de la adaptación a la gran pantalla de la popular novela de ciencia ficción El problema de los tres cuerpos, elogiada por figuras públicas como Barack Obama o Mark Zuckerberg.
Yoozoo había adquirido los derechos para el cine de ese libro en 2014, año en el que creó la filial en la que trabajaba Xu y en el que estableció un presupuesto de 200 millones de yuanes (USD 30,6 millones, 25 millones de euros) para producir las cintas.
Desde entonces, y pese a que el gasto se ha incrementado, las películas han sufrido reiterados retrasos.
En febrero, Yoozoo anunció un acuerdo con Netflix para que esa plataforma produjese una serie basada en la trilogía de El problema de los tres cuerpos en inglés.
Aunque las autoridades todavía siguen investigando el caso y no se han divulgado más detalles sobre el envenenamiento, la prensa china alude al empeoramiento de los resultados económicos de Yoozoo en los últimos años debido a la gran competencia en su sector, aunque con la pandemia del covid-19 sus cuentas habían mejorado por el aumento del uso de videojuegos durante los confinamientos.
Lin controlaba un 24% de Yoozoo después de haber ido vendiendo porciones de su participación como parte de sus intentos de reducir la carga de deuda a la que se enfrentaba su empresa.
El empresario figuraba en el puesto 870 de la lista de personas más ricas de China elaborada por la revista Hurun, con una fortuna estimada en 6.800 millones de yuanes (USD 1 041 millones, 850 millones de euros).
Desde que se conoció la noticia de su hospitalización, las acciones de la empresa -cotizadas en la bolsa de Shenzhen- han perdido casi un 13%, y ahora valen más de un 60% menos que en su pico de este año, vivido a principios de febrero.