El encarcelado disidente chino Liu Xiaobo, galardonado con el Premio Nobel de la Paz 2010, es un intelectual de renombre en su país y en el exterior. Participó activamente, en 1989, en el movimiento democrático que se expresó en la plaza Tiananmen.Liu, 54 años, purga una pena de 11 años de cárcel por tentativa de “subversión del poder del Estado”, tras haber impulsado la Carta08. Este es un texto que reclama que China comunista avance hacia la democracia.En 1989, al regresar de Estados Unidos, donde había enseñado en la Universidad de Columbia de Nueva York, Liu, profesor de la Universidad de Pekín, participó activamente en el movimiento de la Plaza Tiananmen. Fue detenido un año después de la sangrienta represión de ese movimiento y permaneció tras la rejas un año y medio sin haber sido condenado. Entre 1996 y 1999, fue enviado a un campo de “reeducación por el trabajo” por haber reclamado una reforma política y la liberación de los participantes de Tiananmen aún detenidos. Fue excluido de la Universidad y se convirtió en uno de los animadores del Centro independiente Pen China, un movimiento de escritores, conservando un estrecho contacto con el mundo intelectual. Censurado en China, Liu difunde su obra en Hong Kong. En una de sus últimas entrevistas, manifestó su esperanza de una progresiva democratización de China. “ Se va a avanzar muy lentamente, pero no será fácil contener las demandas de libertad tanto de la gente común como de miembros del Partido (comunista) ”, manifestó Liu. El flamante Premio Nobel está casado y es padre de dos hijos. En días pasados, el Gobierno chino había manifestado oficialmente su oposición a que se le atribuyera el Premio Nobel.China denunció ayer enérgicamente el Premio Nobel de la Paz concedido al encarcelado disidente Liu Xiaobo. Lo calificaron de una obscenidad que va en contra de los objetivos del galardón y dijeron que podría dañar las relaciones con Noruega. En cambio, los disidentes chinos celebraron el premio, encabezados por la esposa del intelectual, Liu Xia, que tras una tarde caótica consiguió declarar su alegría a través de SMS y llamadas que escaparon a la censura. La casa de Liu Xia en un barrio periférico de China estuvo custodiada toda la tarde por un grupo de policías. Sin embargo, pudo transmitir que se encuentra “desbordada por la alegría” y convencida de que el premio “puede llevar cambio a China”.En una declaración difundida en Washington por el grupo humanitario Freedom Now, Liu Xia agregó confiar en que “la comunidad internacional aproveche la ocasión para insistir con el Gobierno chino para que libere a mi marido”.De los 90 premios Nobel de la Paz entregados desde 1901, 97 han sido para individuos y 23 para organizaciones.