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Juan Pablo II y Juan XXIII, dos canonizaciones atípicas

Alemania. Wolfgang Kumm / EFE

Alemania. Wolfgang Kumm / EFE

Los papas Juan XXIII y Juan Pablo II subirán definitivamente a los altares de la Iglesia Católica como santos este domingo 27, tras un reglado proceso de canonización salpicado de diversas particularidades.

Y es que los dos futuros santos están tan próximos en el tiempo que sus causas se entrelazan, hasta el punto de que el segundo de ellos, Karol Wojtyla fue el encargado de decretar las "virtudes heroicas" y la beatificación de Ángelo Roncalli. N o obstante, ambos pontífices han atravesado en los últimos años un complejo proceso de canonización, requisito sine qua non para ser santo católico.

L a primera etapa de este proceso es ser reconocido Siervo del Señor y, para ello, los postuladores de la causa presentan a la Santa Sede un informe que, tras su examen, tiene que emitir el decreto 'Nihil Obstat'.

L a Santa Sede comenzó a estudiar el caso de ambos pontífices con celeridad.

E l proceso del "Papa bueno", como se conocía a Juan XXIII, comenzó en 1965, dos años después de morir, mientras que el del Pontífice polaco empezó el mismo año de su deceso, en el 2005, por deseo expreso de su sucesor, Benedicto XVI, quien eliminó el requisito canónico de esperar cinco años tras la muerte para iniciar la causa.

L a siguiente etapa consiste en recibir el reconocimiento de sus "virtudes heroicas", un título que les convierte en Venerables Siervos del Señor.

J uan XXIII fue Venerable más de tres décadas después de su muerte, en 1999, mientras que Juan Pablo II obtuvo este título a los cuatro años de fallecer, en el 2009.

Ya venerables, el siguiente trámite es el de la beatificación.

Para alcanzar este grado, es imprescindible el testimonio de un milagro que se haya llevado a cabo gracias a la intercesión del Venerable.

Al Papa italiano se le adjudicó en el 2000 la curación de la religiosa italiana Caterina Capitani, que estuvo a punto de morir por una perforación gástrica hemorrágica con fístula externa y peritonitis aguda y que, según ella, tras encomendarse a Juan XXIII, consiguió sobrevivir.

AWojtyla se le atribuyen cientos de milagros, aunque para su beatificación en el 2011 fue imprescindible el caso de la monja francesa Marie Simon Pierre, aquejada de Parkinson -la misma enfermedad que padecía el Pontífice polaco- y cuya curación, de acuerdo con los médicos externos convocados por el Vaticano, "carece de explicación científica".

Con la asignación de estos supuestos milagros realizados por intercesión divina de los pontífices, Juan XXIII y Juan Pablo II subían oficialmente a los altares como beatos de la Iglesia Católica, el primero en el 2000 y el segundo en el 2011.

Pero aún tendrían que afrontar el paso definitivo para la culminación de este complejo proceso.

Se trata de la canonización, la meta, su proclamación como santos, para la cual es requisito imprescindible un nuevo milagro que debe producirse después de su nombramiento como beatos.

Es aquí donde se da otra de las particularidades que han caracterizado la causa de Roncalli y Wojtyla.

Y es que, en el caso del italiano, el papa Francisco, en el 2013, decidió decretar su santidad, a pesar de que aún no se había certificado ese segundo milagro.

N o fue el caso de Wojtyla, quien intercedió, según la Iglesia, en la curación de una mujer costarricense aquejada de un grave aneurisma cerebral por el que los médicos le habían dado solo un mes de vida.

Un millón de peregrinos

El papa emérito Benedicto XVI presenciará la canonización, a la que se espera que asistan hasta un millón de personas, según informaron ayer las autoridades y organizadores de la ceremonia en Roma.

Se han imprimido 1,2 millones de fotos de Juan Pablo II y Juan XXIII que serán distribuidas entre los asistentes en el Vaticano, sus alrededores y otros espacios públicos, como la plaza Navona.

Para el acontecimiento se desplegarán 2 400 policías, 2 000 guardias de tráfico y 1 000 barrenderos extras, además de 3 000 voluntarios y cientos de efectivos médicos. El evento tendrá para la ciudad un costo de 5 millones de euros (unos USD 7 millones). Además, 5 000 sacerdotes saldrán a la calle para ofrecer asistencia espiritual a los peregrinos.

  • Juan Pablo II fue el primer papa no italiano desde la elección del holandés Adriano VI en 1522. Su nombre original fue Karol Wojtyla y nació en Polonia.
  • Su pontificado fue el más largo del siglo XX (1978-2005). Presidió un total de 482 canonizaciones.
  • Juan XXIII fue elegido para ser un Pontífice de transición, pero se convirtió en un papa revolucionario para la Iglesia al convocar el Concilio Vaticano II.
  • De origen italiano, Ángelo Roncalli modernizó la vida en el Vaticano y flexibilizó el protocolo.