El politólogo y periodista Vicente Torrijos analiza los escenarios de cara a las elecciones en Venezuela.
¿Qué significado tienen para el presidente Hugo Chávez las elecciones legislativas?
Están en juego la credibilidad, la estabilidad y la permanencia del proyecto político. Pero la revolución bolivariana, por supuesto que es independiente de la suerte que se corra en el Legislativo, por cuanto los diferentes mecanismos que ha ideado el presidente Chávez le permitirán, seguramente, contar con la mayoría y, sobre todo, ponerlo en plataforma para su verdadero objetivo: la reelección indefinida.
¿Los comicios de este domingo, entonces, son una especie de abreboca de las presidenciales del 2012?
Más que un abreboca son una ‘máscara’. Una ‘máscara’ tras la cual se oculta la realidad en Venezuela. Esa ‘máscara’ de mil colores hace aparecer a la hermana República como si fuera una democracia de tipo occidental, cuando el mismo Régimen se ha catalogado como marxista. Esos reducidos núcleos de oposición, que tratan de sobrevivir, en cierta forma están legitimando a ese Régimen autoritario. A pesar de sus esfuerzos, ellos mismos son conscientes de que Chávez no va a ser desplazado del poder mediante ejercicios electorales como este.
Sin embargo, se asegura que Chávez está en su peor momento político. ¿Es así?
Yo creo que el presidente Chávez nunca ha estado en un buen momento político. Si lo analizamos desde que entró al poder, lo único que ha podido hacer es el ajuste de los mecanismos para mantenerse en el Gobierno.
La historia nos demuestra, por lo menos en América Latina, que a medida que la popularidad se va perdiendo, el Régimen se va atornillando y reduciendo al máximo cualquier expresión de disidencia. Y, por supuesto, se adueña también de los canales de comunicación con lo cual entra a controlar todos los aspectos de la vida social. De tal manera que cuando llega al mínimo de popularidad, ya está suficientemente consolidado en el poder y no importa la voluntad popular.
Pese a todo, ¿el actual escenario configura o no la posibilidad de un revés electoral para Chávez y su partido?
Chávez ha tomado medidas para hacer que sean no tan representativos los distritos electorales donde menos popularidad tiene. Eso le garantiza a él la continuidad en el control de la Asamblea Nacional. En ese sentido, no vamos a extraer de estas elecciones unas conclusiones ciertas acerca del poder verdadero que tiene la oposición. La lectura que se haga después de estos comicios va a ser fragmentaria y parcial.
Por primera vez en los 11 años de Chávez , se ve a una oposición unificada.
Es loable que la oposición haya dado paso a unas candidaturas unificadas. Eso en el difícil panorama venezolano, ya es un logro. Pero estoy seguro que Chávez se las va a ingeniar para que los opositores sigan siendo una ‘fachada’.