El presidente de Níger, Mahamadou Issoufou, llega para asistir a las celebraciones del Día Nacional de la Democracia de Nigeria en Abuja. Foto: AFP
Una iglesia fue incendiada el sábado 15 de junio de 2019 en la noche en Maradi, tercera ciudad de Níger, por manifestantes que protestaban contra la detención de un imán, que fue liberado este domingo 16 de junio de 2019, informaron fuentes coincidentes.
“La iglesia de Zaria (barrio popular de Maradi) fue incendiada, el automóvil del pastor fue quemado por individuos que no conocemos (…) seamos prudentes”, afirmó un responsable de la iglesia en un mensaje dirigido a los parroquianos y transmitido a la AFP.
Una fuente de seguridad local confirmó el incendio de esta iglesia.
Un influyente imán de la mezquita de Zaria, Jeque Rayadun, había sido detenido el sábado 15 de junio de 2019 por la policía, según sus allegados, tras haber calificado de “anti-islam” un proyecto de ley del gobierno sobre la “organización del ejercicio del culto en Níger”.
El imán fue “puesto en libertad este domingo en la tarde, él reconoció su error y se disculpó”, indicó a la AFP una fuente de la policía.
“Todos mis seguidores tienen que dejar de quemar y de crear problemas en la ciudad, el islam no aconseja eso, yo no fui maltratado de ninguna manera por la policía”, declaró el Jeque Rayadun en un mensaje poco antes de ser liberado.
El proyecto de ley, adoptado en abril en Consejo de ministros, pretende otorgar al Estado los medios para “controlar las prácticas en curso en la esfera religiosa”, en un contexto de “desarrollo de tendencias religiosas fundamentalistas y extremistas”.
Níger es un país mayoritariamente musulmán, con apenas entre 1 y 2% de cristianos sobre una población de más de 20 millones de habitantes.
Ya ha sido escenario de graves disturbios religiosos. Tras la publicación de caricaturas del profeta Mahoma por el semanario francés Charlie Hebdo en 2015, una serie de disturbios anticristianos causaron 10 muertos en Niamey y la destrucción de la mayoría de las iglesias de la capital y de Zinder, la segunda ciudad del país.