Los inventos que han causado grandes adelantos a la humanidad y las grandes conflagraciones que han causado miles de muertes tienen algo en común: ambas nacieron a partir de una idea.
Pero lo que puede parecer obvio no lo es cuando ignoramos cómo algo se le pudo ocurrir a otros y no a usted o a mí. Me sucedió algo así cuando descubrí por primera vez los libros de Harry Potter: ¿de dónde le vino a J. K. Rowling la idea de las cervezas de mantequilla, los muggles y la receta para preparar la poción multijugos?
La respuesta la hallé hace pocos días -junto a una verdadera clase de motivación-, en un video de la escritora británica hablando en una graduación de la Universidad de Harvard en el 2008 (1). Es solo una de las miles alocuciones compartidas en TED (Tecnología, Entretenimiento y Diseño), una página que nació antes de que las redes sociales para compartir esas ideas que han trascendido y en la cual los expositores también se transforman en los espectadores (2). Los alrededor de 600 videos que se han subido en ese sitio ya han tenido más de 200 millones de visitas.
Pero lo más interesante de esto es que, dentro del interés de los creadores de TED de difundir el conocimiento, cada año organizan encuentros donde se comparte ‘el qué y el cómo’ de las iniciativas exitosas. Hay una en Oxford, otra en San Francisco y otra en la India. Y este año habrá una en Buenos Aires, como una forma de dar oportunidades a los que no pueden pagar los USD 6 000 que cuesta asistir a las otras tres. Más de 25 oradores del campo de las ideas, las iniciativas sociales, la tecnología, el diseño, las artes y las ciencias hablarán el próximo 8 de abril ante más de 1 000 espectadores de lo que piensan, hacen y sueñan (3).
En el sitio web del evento también será posible ver las conferencias en vivo, porque ha sido tanto el interés que todas las entradas ya están agotadas.
La única limitante de los videos que están en la página de TED es que no todos están subtitulados en español, es decir, el que no habla inglés no puede aprovecharlos. Por eso, si usted quiere ejercitarse en su conocimiento de la lengua de Shakespeare, tiene la opción de ser un traductor voluntario (4)… Quién sabe, a lo mejor usted tiene habilidad para dedicarse a ese oficio, ¡y solo le hacía falta una idea!
Por si le interesa: (1) www.ted.com/talks/jk_rowling_the_fringe_benefits_of_failure(2) www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id>1248124(3) tedxbuenosaires.org/ (4)www.ted.com/pages/id/293