La candidata presidencial demócrata Hillary Clinton celebra en el escenario después de que ella aceptó la nominación durante la cuarta y última noche de la Convención Nacional Democrática en el Wells Fargo Center el 28 de julio de 2016, Filadelfia. Foto: AFP
Hillary Clinton ofreció “un liderazgo fuerte” en un mundo turbulento y más oportunidades económicas para más estadounidenses en su discurso de aceptación de la candidatura demócrata a la Casa Blanca, en el que instó a los votantes a rechazar “las promesas vacías” de Donald Trump.
“Así que, amigos, es con humildad, determinación y confianza ilimitada en la promesa de Estados Unidos que acepto vuestra nominación para presidenta de Estados Unidos”, dijo Clinton en la Convención Nacional Demócrata en Filadelfia (Pensilvania) ayer, jueves 28 de julio del 2016.
Clinton es la primera mujer que logra la candidatura de uno de los dos principales partidos de Estados Unidos a la Casa Blanca. El desafío de Hillary Clinton era dar un discurso a la altura de los que esta semana pronunciaron en Filadelfia su esposo, el ex presidente Bill Clinton, y el presidente Barack Obama y la primera dama Michelle Obama.
Los tres habían dejado el listón muy alto. Estuvo a la altura. Clinton inyectó una dosis de optimismo a los estadounidenses en contraste con el discurso apocalíptico que Donald Trump y los republicanos ofrecieron la semana pasada en la Convención Nacional Republicana en Cleveland (Ohio).
Según Clinton, Trump habló mucho, pero ofreció “cero soluciones” a los problemas del país. “No dejen que nadie les diga que este país es débil. No lo somos. No dejen que nadie les diga que no tenemos lo que hay que tener. Lo tenemos. Y lo más importante, no crean a alguien que les diga: Yo solo puedo arreglarlo”, advirtió Clinton.
“Ninguno de nosotros puede hacerlo solo. Es por ello que juntos somos más fuertes”, proclamó la ex primera dama. La candidata demócrata criticó que su adversario se le llene la boca diciendo que pondrá primero a Estados Unidos y los trabajadores
estadounidenses y luego fabrica sus productos en el extranjero. En cambio, el Partido Demócrata es “el partido de los trabajadores”, aseguró Clinton. Clinton exhibió en la Convención Nacional Demócrata su brillante currículum: abogada, activista, primera dama, senadora y secretaria de Estado. Y se presentó como la más preparada para ser presidenta de los Estados Unidos y comandante en jefe. “¿Tiene Donald Trump el temperamento para ser comandante en jefe?”, preguntó Clinton.
La candidata cree que la respuesta es no, porque Trump “pierde la calma a la menor provocación”. “Imagínenselo en el Despacho Oval frente a una crisis real. Un hombre al que puedes provocar con un tuit es un hombre al que no se le debe confiar con armas nucleares”, dijo tajante Clinton.
La candidata presidencial demócrata aseguró que ella es consciente de las amenazas en materia de seguridad a las que se enfrenta Estados Unidos.
“Somos realistas sobre lo que se enfrenta nuestro país. Pero no tenemos miedo. Estaremos a la altura de las circunstancias, como siempre lo hemos estado”, dijo Clinton, que tuvo a su hija Chelsea como telonera en la convención y a su esposo, el ex presidente Bill Clinton, entre el público.
Clinton dejó claro que si es elegida presidenta de Estados Unidos en noviembre, no construirá un muro en la frontera con México, tal y como ha prometido que hará Trump. “No construiremos un muro… Vamos a construir una economía donde todo el que quiera un buen trabajo pueda conseguirlo”, dijo Clinton.
Trump ha prometido que deportará a 11 millones de inmigrantes indocumentados y que construirá un muro en la frontera sur, que hará pagar a México. Clinton, en cambio, prometió una reforma migratoria con un camino a la ciudadanía. “Cuando tenemos a millones de inmigrantes contribuyendo a nuestra economía sería contraproducente e inhumano expulsarlos”, añadió Clinton.
La ex primera dama, que habló durante una hora, hizo un canto a la unidad, tanto del partido como del país en torno a ella frente al mensaje divisorio de Donald Trump. “Él quiere dividirnos, del resto del mundo y uno del otro. Quiere que temamos el futuro y que nos temamos los unos a los otros”, aseguró Clinton sobre su rival.
La candidata instó a la unidad de los demócratas para derrotar al republicano en las urnas. Agradeció a su rival en las primarias, el senador Bernie Sanders, por llevar la justicia social y económica a la campaña electoral. Y ofreció a una rama de olivo a sus seguidores, muchos todavía reticentes a apoyarla.
“Los he oído. Su causa es nuestra causa”, dijo Clinton. “Seré la presidenta de demócratas, republicanos e independientes; de aquellos que luchan, se esfuerzan y tienen éxito. De aquellos que me votan y aquellos que no; de todos los estadounidenses”, dijo Clinton. “Ganemos esto, juntos”.