Desde las primeras horas de este domingo, más de 20 000 personas han acudido a la basílica Santa María la Mayor en Roma.
Su intención fue rendir homenaje al papa Francisco, cuya tumba fue abierta al público por primera vez.
Desde las primeras horas ya se observaban largas filas de fieles esperando ingresar al templo papal, considerado uno de los más antiguos y sagrados de la capital italiana.
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Largas filas para visitar la tumba papal en Roma
Según fuentes policiales italianas, hasta el mediodía, 13 000 fieles habían accedido al interior de la iglesia, mientras otros miles aguardaban en filas que se extendían por varias calles aledañas.
Esta muestra de devoción masiva subraya la relevancia histórica y espiritual del papa Francisco, cuyo legado sigue vivo en el corazón de la comunidad católica mundial.
Francisco reposa junto a la Virgen Salus Populi Romani
La tumba del papa Francisco, sencilla y de piedra, se encuentra ubicada junto a la capilla que alberga a la venerada imagen de la Virgen Salus Populi Romani.
Es la figura mariana a la que el pontífice argentino profesaba gran devoción. El templo de Santa María la Mayor fue elegido por él mismo para ser su última morada, en honor a sus raíces italianas y su fe mariana.
Una lápida de Liguria con la inscripción Franciscus
Cumpliendo su voluntad, el papa fue sepultado bajo una lápida austera hecha de piedra de Liguria, región natal de sus antepasados.
La tumba está iluminada de manera tenue, con la única inscripción “Franciscus”, escrita en latín, como símbolo de su humildad y cercanía con el pueblo.
Funeral solemne y cortejo en Roma
El sábado 26 de abril, el papa Francisco fue despedido con un funeral solemne en la Plaza de San Pedro del Vaticano, seguido de un cortejo fúnebre por la Roma monumental, hasta llegar a su lugar de descanso final.
Este acto reunió a más de 250 000 de personas y líderes religiosos de todo el mundo, marcando un momento histórico en la Iglesia católica.
