Buzos del Ejército y de la Armada han colaborado en las tareas de rescate. Foto: EFE
Las posibilidades de hallar con vida a los dos trabajadores de una mina de oro en el sur de Chile que se inundó el 9 de junio del 2017 son prácticamente nulas, según afirmó el 21 del mismo mes el geólogo Felipe Matthews, quien encabeza las tareas de rescate.
“Posibilidades de vida, yo creo que es obvio, es una posibilidad descartada”, dijo el experto en declaraciones a los periodistas.
El geólogo indicó que los sondajes que se realizaron durante las últimas horas revelaron que el refugio donde se podrían haber resguardado los dos mineros está lleno de agua y lodo.
“La evidencia indica claramente que tenemos lodo en la zona del refugio. Comprobamos que la mina está con un nivel importante de lodo y en este caso específico en la zona del refugio, donde había alguna esperanza de que pudieran estar los trabajadores”, explicó Matthews.
Los mineros Enrique Ojeda (34) y Jorge Sánchez (25) trabajaban en una galería a unos 1 300 metros de la entrada de la mina Delia 2, situada en la sureña región de Aysén y propiedad de la firma canadiense Mandalay Resources, cuando el 9 de junio el lugar se inundó al colapsar un muro.
Pese a las malas noticias, el representante del Gobierno en la región de Aysén, Jorge Díaz, anunció que las autoridades y las Fuerzas Armadas tienen la voluntad de continuar las labores de rescate.
“La voluntad del Gobierno permanece intacta para seguir ayudando, colaborando y manteniendo el equipo de los servicios del Estado y Fuerzas Armadas para lograr el objetivo que nos hemos propuesto”, señaló Díaz.
Buzos del Ejército y de la Armada han colaborado en las tareas de rescate, que han incluido también varios sondajes dirigidos al sector donde se creía que podían estar los dos trabajadores.