El grupo separatista vasco ETA, que declaró una tregua este mes, llamó a una mediación internacional para poner fin a “un conflicto político de siglos”, informó ayer el diario español Gara, citando un comunicado.
Según citó la publicación, el grupo afirma su “disposición a estudiar de forma conjunta los pasos que precisa el proceso democrático, incluidos los compromisos que debe adoptar ETA”.“Si hay voluntad democrática, hoy y aquí es posible solucionar el conflicto” sostuvo el comunicado publicado en la página web de Gara (https://www.gara.net/).
Tras conocerse su publicación, el Gobierno español evitó ofrecer declaraciones, mientras que desde el principal partido de la oposición restó importancia a su validez. “ETA ha vuelto a dar otro comunicado, no nos vale. El único comunicado que nos interesa de la organización terrorista ETA es aquel en el que diga ‘nos disolvemos y se acabó el terrorismo’”, dijo el líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, durante un acto en la localidad de Antequera.
El mediador internacional Brian Currin presentó el pasado marzo en el Parlamento Europeo un documento firmado por 19 personalidades entre las que se encontraban cuatro premios Nobel de la Paz y en el que se pedía a ETA un “alto al fuego permanente (…) unilateral e incondicional”, controlado por un organismo internacional independiente.
Entre los firmantes de la ‘Declaración de Bruselas’ se encontraba la Fundación Nelson Mandela, el arzobispo sudafricano Desmond Tutu, la ex presidenta de Irlanda Mary Robinson y John Hume, que participó en los Acuerdos de paz de Viernes Santo en Irlanda.
ETA, que lucha por una patria vasca independiente que incluya parte del norte de España y el sur de Francia, ha sido debilitada por los arrestos recientes de miembros clave y por incautaciones de armas realizadas por las policías española, francesa y portuguesa.
El comunicado de ETA insta a los miembros de la comunidad internacional “para que impulsen y para que participen en la estructuración de un proceso democrático que dé solución permanente, justa y democrática a un conflicto político de siglos”.
El grupo, que ha causado la muerte de más de 850 personas desde 1968, anunció una tregua el 5 de septiembre pero no ofreció detalles sobre su duración o planes de desarme, lo que llevó al Gobierno español a mostrarse escéptico ante ese anuncio.
“Ante la cerrazón de Francia y España, ETA ha hecho zarpar de nuevo el barco de la oportunidad para la resolución democrática del conflicto. Y ha tomado la primera decisión sin echar el ancla, con disposición de navegar en aguas más profundas”, indicó el texto. “La solución debe ser firme inevitablemente, construirse en torno a compromisos multilaterales y desarrollarse a través del diálogo y de la negociación”, agregó.
En el pasado la ETA ha roto varios ceses al fuego, más recientemente en el 2006 con un mortal ataque explosivo en el aeropuerto de Barajas en Madrid.
Su último asesinato ocurrió en marzo, cuando miembros del grupo dieron muerte a un policía francés que trató de arrestarlos durante el robo de un auto en las cercanías de París.
ETA ha enfrentado una renovada presión, incluso dentro de sus filas, para que abandone las armas y busque una negociación que le permita participar en las próximas elecciones regionales.
