Gilbert Serna y Adria González, dos héroes del tiroteo de Texas. Foto: Captura
El acto heroico de Gilbert Serna y Adria González quedó registrado en la memoria de unas 140 personas que sobrevivieron al tiroteo masivo del pasado sábado 3 de agosto del 2019 en un centro comercial de El Paso, Texas, en Estados Unidos.
Según un reporte de la cadena CNN, cuando se escucharon los primeros disparos en los exteriores de una tienda Walmart de El Paso, en el centro comercial, Gilbert Serna estaba parado cerca de la parte trasera del local, en ese instante escuchó un “código marrón” anunciado por la radio. Le llevó un momento darse cuenta que eso significaba un tirador activo.
Inmediatamente, el hombre de 36 años hizo una señal y llamó a los clientes y compañeros de trabajo para que lo siguieran a la trastienda del local. “Estábamos a la intemperie”, dijo Serna a la CNN. “Abrí los contenedores de envío y les dije a todos que entraran”. En lugar de quedarse con ellos a salvo, él cerró la puerta y salió a ver a quién más podía ayudar.
Cerca de 100 personas quedaron en un sitio seguro, antes de que Serna regresara al estacionamiento donde se efectuaban los disparos.
“Tenía miedo, no voy a mentir, pero no estaba pensando en mi propia seguridad. Estaba pensando en la seguridad de todos los demás”, contó Gilbert Serna a CNN el lunes 5 de agosto. En el parqueadero se dio cuenta que se trataba de un tiroteo masivo.
El hombre caminó por el costado del edificio y notó que otras personas estaban en el estacionamiento, entre ellas 6 o más miembros de un equipo de fútbol femenino que recaudaban fondos frente a la tienda. Él les llevó a una tienda de al lado y les recomendó que esperaran a la policía.
El tiroteo registrado en los exteriores de un Walmart en El Paso, Texas, el 3 de agosto de 2019, dejó al menos 22 personas fallecidas y 26 heridos. foto: EFE
Mientras Serna ayudaba a escapar a las personas, una mujer intervino. Se trataba de Adria González, quien se sumó al intento de salvar a vidas. Primero tomó a su madre por la blusa, la haló y llegó a un área de almacenamiento en el Walmart.
González y su madre realizaban la compra de víveres y algunos útiles escolares que iban a donar esta semana. Ambas caminaban cerca del mostrador de carne cuando comenzó el tiroteo, narró la mujer a la cadena de televisión.
Adria, que es maestra asistente, se quitó su sombrero rosa y lo agitó hacia las personas cercanas, para señalarles la salida. “Let’s go, let’s go. Vamos, vamos”, dijo la mujer de 37 años en inglés y español. “Vámonos”, según ella relató a la televisora.
Cerca de 40 personas la siguieron al área de almacenamiento cerca del mostrador de carne, donde esperaron en silencio. Aguardaron hasta que ya no pudieron oír ningún disparo.
Minutos después de que el tiroteo se detuvo, el grupo corrió y salió del edificio a gran velocidad.
Otros empleados del Walmart ayudaron a las personas para que aborden sus automóviles y escapen del lugar, dijo González.
“Ves esto en las películas, pero cuando lo vives tú mismo, cuando ves a una persona matando, la sangre en todas partes, estás en estado de shock”, comentó la maestra que ahora es considerada como una heroína.
Su automóvil se quedó en el estacionamiento del centro comercial. Ambas mujeres consiguieron que alguien las llevara a un lugar seguro. Ellas solo querían escapar. Dos días después del tiroteo, asegura que los pensamientos de lo que vio y oyó permanecen en su mente.
Adria relató que vio a un niño de edad escolar recibir un disparo en la pierna cerca de la entrada, mientras otro hombre sangraba en el piso y una persona que estaba cubierta de sangre trataba de alcanzar a otro menor que estaba cerca.
A pesar de que las imágenes de la tragedia de El Paso, que dejó 22 muertos y decenas de heridos, estarán en la memoria de los vecinos de la localidad, los dos héroes permanecerán en los corazones de quienes se salvaron gracias a su ayuda.