Diálogo migratorio entre EE.UU. y Cuba

Cuba y Estados Unidos celebraron ayer la tercera ronda de un diálogo migratorio, pero hubo pocos signos de progreso y funcionarios estadounidenses protestaron nuevamente contra la detención en La Habana de un contratista de su país por supuesto espionaje. El portavoz del Departamento de Estado, Philip J. Crowley, dijo que pese a algunos obstáculos, también hubo progresos, como la validación de la efectividad del mecanismo que busca promover la emigración segura y ordenada.

El encuentro, que el presidente Barack Obama reanudó tras interrupción en el 2004 por su predecesor George W. Bush, se basa en los acuerdos migratorios firmados en la década de 1990 para evitar éxodos masivos como el del Mariel en 1980 y la ola de balseros de 1994.

“En esta ronda avanzamos en la identificación de aspectos que nos permitirán fortalecer el enfrentamiento al tráfico de emigrantes, lo cual valida la utilidad de estos encuentros”, dijo el vicecanciller cubano, Dagoberto Rodríguez, según un comunicado de prensa en La Habana.

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