Vista de una Vivienda Demostrativa Ecosostenible dentro del complejo del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), este viernes 11 de diciembre del 2020 en La Paz. Foto: EFE
El uso de energía solar avanza en Bolivia con iniciativas como la fabricación a pequeña escala de cocinas, bombillas, cargadores, sistemas de bombeo de agua y un vehículo, una muestra del potencial de esta energía renovable, especialmente en las áreas rurales y periurbanas del país.
El Fondo de Acceso Sostenible a Energía Renovable y Tecnologías Eficientes (Faserte) junto al Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) y otras organizaciones fomentan la dinamización de mercados con alternativas que utilizan energías más limpias con el objetivo de mitigar los efectos del cambio climático.
En ese marco, ambas entidades mostraron este viernes algunos emprendimientos locales que han desarrollado diversas iniciativas que emplean energía solar.
Una de ellas es una cocina solar fabricada por la organización Inti Illimani que ya se vende en regiones bolivianas como La Paz, Cochabamba y Santa Cruz, sobre todo en las áreas rurales, y que tiene un tiempo de cocción de alimentos de entre tres a cuatro horas.
La senadora Virginia Velasco maneja este viernes 11 de diciembre del 2020 el auto solar fabricado por estudiantes de Ingeniería Eléctrica de la Universidad Pública de El Alto (UPEA), con paneles solares, denominado “Alt Katari MRC 4”, en La Paz. Foto: EFE
La comida entra en una especie de caja que por arriba es transparente y que debe estar expuesta al sol para su uso y es muy requerida, por ejemplo, en las poblaciones cercanas al salar de Uyuni, en la región andina de Potosí, contó a Efe el técnico del IICA, Rubén Guarayo.
La empresa también enseña a fabricar estas cocinas en algunas poblaciones rurales, además de dar capacitaciones sobre su uso para promover esta energía renovable, acotó Guarayo.
También mostraron a la prensa bombillas y linternas que emplean energía fotovoltaica y cargadores de teléfonos móviles que tienen un pequeño panel solar.
Otro de los proyectos de mayor impacto son los sistemas de bombeo solar a través de paneles fotovoltaicos que son utilizados en el campo, sobre todo para la hidratación del ganado y el riego de cultivos, manifestó el técnico.
La muestra de algunos de estos emprendimientos y proyectos tiene el objetivo de hacer conocer el “potencial energético” que tiene el país por la alta radiación solar que existe especialmente en el altiplano boliviano.
“La energía solar llega a nuestro país con mucha fuerza por el lugar en el que nos encontramos y estos paneles solares están diseñados para convertirlas en energía eléctrica que es menos contaminante”, indicó a Efe el director técnico del Fasertes, Marco Antonio Romero.
Auto solar
Un grupo de estudiantes de Ingeniería Eléctrica de la Universidad Pública de El Alto (UPEA) presentó un auto solar fabricado por ellos mismos con unos siete paneles solares, una autonomía de dos horas y que puede llegar a una velocidad de 50 kilómetros por hora.
Los estudiantes junto a investigadores crearon este vehículo, denominado “Alt Katari MRC 4”, con la idea de participar en la Carrera Solar Atacama, que se realiza todos los años en Chile, pero no pudieron por la pandemia de la covid-19, dijo a Efe el universitario Manfred Castillo.
“Bolivia tiene un gran potencial, sobre todo en el occidente del país”, manifestó el joven.
Los estudiantes, los investigadores y los docentes de la UPEA fueron reconocidos por el IICA y la senadora Virginia Velasco por su iniciativa.
Bolivia cuenta con algunas plantas de energía solar en regiones como Tarija, Potosí y en la amazónica Pando.