Catrinas, calaveras y carros alegóricos se tomaron este 28 de octubre del 2017 las calles de la Ciudad de México en el desfile con motivo del Día de Muertos, que este año dedicó un espacio a homenajear a las víctimas del terremoto del 19 de septiembre, así como a los voluntarios que ofrecieron su ayuda. Foto: EFE
Un puño gigante hecho con cascos desgastados, apoyado en picos de excavar y bloques de cemento, encabezó el Desfile del Día de Muertos de Ciudad de México este 28 de octubre del 2017, en homenaje a los rescatistas que removieron escombros hace apenas unas semanas en la ciudad.
Hace un mes y medio, el 19 de septiembre, un fuertísimo terremoto provocó 280 muertos en la capital mexicana y casi 90 en otras partes de México. El 7 de septiembre otro sismo había dejado un centenar de víctimas sobre todo en Oaxaca y Chiapas, en el sur del país.
A pocos metros del Paseo de la Reforma, por donde avanzó el sábado el colorido desfile de calaveras gigantes, esqueletos rumberos y carros alegóricos, todavía hay escombros y edificios que serán demolidos. Así que el carnaval del Día de Muertos, que por segundo año consecutivo tomó las calles de la ciudad, quiso honrar a víctimas y socorristas, que levantaban el puño para pedir silencio durante los rescates.
Varias personas participan en el desfile con motivo del Día de Muertos en Ciudad de México (México). Foto: EFE
Cuatro perros de rescate conducidos por policías y militares, así como un grupo de rescatistas con chalecos anaranjados y cascos, conformaron el primer grupo del desfile, que reunió a un millón de personas, de acuerdo con el alcalde de Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera.
Luego vendrían los contingentes de personas disfrazadas y esqueletos de papel maché sacudiendo los huesos al ritmo de “Cielito lindo” y “La vida es un carnaval”, a pleno sol. El carnaval, que quiere algún día superar al de Río de Janeiro aunque para eso le falta, recorrió siete kilómetros durante cerca de tres horas, inspirado en las tradiciones mexicanas del Día de Muertos.
Desde temprano la gente se acomodó a lo largo de las vallas colocadas desde la Estela de Luz a la Plaza del Zócalo, donde confluyeron todos los contingentes para terminar la fiesta. Muchos de los asistentes llevaban la cara pintada de blanco con las cavidades de los ojos y la mandíbula en negro, chupadas por la muerte, algunos con tocados de flores en la cabeza.
El desfile coincide con el Gran Premio de México de Fórmula 1 y es una idea que se tomó de la película “Spectre” (2015), protagonizada por Daniel Craig. El filme abre con una escena filmada en Ciudad de México donde el agente James Bond y una acompañante caminan disfrazados en un carnaval de Día de Muertos. Hasta entonces, no existía el desfile.
En el carnaval hubo desde luchadores enmascarados a esqueletos en bicicleta y patines, un cementerio móvil con flores anaranjadas de cempasúchil y dos esqueletos recién casados en una carroza que decía: “Hasta que la muerte nos separe”.
El Día de Muertos de este año se dedicó un espacio a homenajear a las víctimas del terremoto del 19 de septiembre, así como a los voluntarios que ofrecieron su ayuda. Foto: EFE
La celebración tradicional del Día de Muertos mexicano se centra en la confección de “altares” con ofrendas en las casas y arreglos en los cementerios para recibir el alma de los muertos el 1 y 2 noviembre. En su manera indígena de celebrarse, la festividad fue incluida en 2008 por la Unesco en su lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Con el carnaval de calaveras comenzaron los festejos en Ciudad de México, que incluyen una Ofrenda Monumental en la Plaza del Zócalo, recitales y un paseo en bicicleta nocturno de gente disfrazada, con el que concluirán las actividades el 4 de noviembre.