Las dos mujeres que se disputan la Alcaldía de París se enfrentaron hoy por la forma de combatir la contaminación atmosférica, el tema que por su actualidad parece centrar la última semana de la campaña antes de la primera vuelta de las elecciones el próximo domingo.
La socialista de origen español Anne Hidalgo, favorita de las encuestas, se pronunció en favor de la medida sorpresa decretada para el área metropolitana de París por el Gobierno de izquierdas para hacer frente, a partir de mañana, a las alertas por micropartículas en el aire: la circulación alterna de vehículos.
“Estoy en favor de medidas de restricción de la circulación” que “complementan” las que se han tomado en los últimos días, como la gratuidad del transporte público, del servicio de bicicletas y coches eléctricos o del aparcamiento residencial, señaló Hidalgo en defensa de la prohibición de circular los vehículos, según tengan la matrícula par o impar.
La teniente de alcalde de París alegó el “riesgo sanitario” para imponer ese dispositivo, que debe impedir que mañana al ser día impar (17) utilicen sus coches en París y en los tres departamentos limítrofes los que tengan una matrícula par y el martes los de matrícula impar, si la medida se prolonga.
Pero no se limitó a respaldar una medida que sólo se ha experimentado una vez en Francia (en 1997), que se anuncia polémica y con posibles efectos sobre la votación del próximo domingo, sino que aprovechó para atacar a su gran contrincante, la exministra de Ecología conservadora Nathalie Kosciusko Morizet.
En una entrevista a la televisión BFM TV, Hidalgo hizo notar que “si hemos llegado hasta aquí” en la contaminación es porque el Gobierno del anterior presidente francés, Nicolas Sarkozy, en el que fue ministra Kosciusko Morizet, favoreció a los vehículos diesel, los que emiten micropartículas contaminantes.
Kosciusko Morizet, por su parte, recriminó al Gobierno francés pero también al municipal de Hidalgo, “no haber trabajado sobre la contaminación de fondo” y haber esperado a que se superaran los niveles de alerta esta semana para tomar medidas de urgencia.
“Tendrían que haber sido previsores”, señaló en declaraciones a la emisora France Info la que fue en 2012 portavoz de la fracasada campaña para la reelección de Sarkozy.
Reprochó a los responsables de París que ahora actúan “porque se ha convertido en un tema político. No les preocupa la contaminación por la salud de los parisinos, sino por las elecciones”.
Más allá de esta cuestión de actualidad rabiosa, las dos pretendientes han ido contraponiendo otros puntos de sus programas, en particular en la vivienda, los impuestos o la apertura de los comercios los domingos y festivos, pero también sus propios estilos políticos y personales.
Es verdad que las dos son mujeres, pero sus biografías las separan con claridad. Hidalgo nació en la localidad gaditana de San Fernando hace 54 años en una familia de republicanos españoles y de niña sus padres decidieron emigrar a Lyon, donde se crió y empezó a destacar en sus estudios, con los que llegó a inspectora de trabajo.
Con ese oficio dio el salto a París, donde su implicación en el feminismo y en el socialismo le llevó a entrar en la política activa de la mano de la exministra Martine Aubry antes de convertirse en 2001 en teniente de alcalde de París.
Kosciusko-Morizet, hija y nieta de políticos conservadores de renombre, hermana de un conocido empresario, nació en París hace 40 años, hizo brillantes estudios de ingeniería y en escuelas de negocios antes de ser la diputada más joven de la Asamblea Nacional tras los comicios de 2002.
Su carrera política desde entonces no ha dejado de ser meteórica, con su entrada como ministra en el gobierno de Sarkozy o su elección como alcaldesa en la ciudad de Longjumeau, en las afueras de París.
Y es un secreto a voces que su ambición es poder optar en el futuro a la presidencia de la República. Desde el inicio de la campaña, los sondeos han mostrado unos resultados bastantes estables en los que sistemáticamente Hidalgo ha aparecido como la favorita en el previsible duelo de la segunda vuelta que se celebrará el día 30.
En los publicados esta semana, Ifop daba a la socialista la victoria por un 53 %, frente al 47 % para Kosciusko Morizet, y Ifop un 52,5 % frente al 47,5 %.