La policía de Pakistán acusó a un bebé de nueve meses de intento de asesinato, en un caso que ha generado una ola de indignación en el país y que acabó forzando a las autoridades a retirar la denuncia, informó hoy, sábado 12 de abril de 2014, un abogado de la familia.
Un juez de la ciudad de Lahore ordenó además a la policía que explique qué es lo que pasó, indicó el letrado Irfan Tarar. El caso llegó a los medios cuando el niño tuvo que comparecer la semana pasada ante una corte por primera vez. En imágenes de la televisión se lo vio llorando en brazos de su familia mientras un empleado judicial le tomaba las huellas dactilares.
El juez lo dejó libre bajo fianza. En febrero, habitantes enfurecidos de una favela atacaron a varios policías que acudieron a cortales la luz por falta de pago. Unos 30 hombres, entre ellos el padre del niño, fueron arrestados.
Tarar aseguró que la policía acusó a padre e hijo sin mirar siquiera su edad. Un portavoz policial alegó que la acusación fue un error y que el responsable ha sido suspendido del servicio.
El sistema judicial de Pakistán está considerado anticuado y complejo. De todos modos, la ley prohíbe perseguir penalmente a menores de siete años, subrayó el abogado Rizwan Khan, de Islamabad. “Es posible que no hubiese mala intención, pero se trata de un caso de grave negligencia”.