Un álbum de las víctimas del tiroteo en Virginia se exhibió durante un servicio memorial en EE.UU. Foto: AFP
El empleado municipal que asesinó a 12 personas el viernes 31 de mayo de 2019 en Virginia Beach y fue abatido por la policía había presentado su renuncia apenas unas horas antes del tiroteo, informaron el domingo 2 de junio de 2019 las autoridades de esta ciudad estadounidense.
Interrogado en rueda de prensa, el jefe administrativo de este balneario de la costa este confirmó que el atacante, DeWayne Craddock, había renunciado el viernes con dos semanas de preaviso.
“Advirtió a sus superiores jerárquicos esa mañana, el viernes”, declaró Dave Hansen. “Según supe, lo hizo por correo electrónico”.
“Estamos buscando dónde se halla ese correo”, agregó, sin dar más precisiones. Tras el tiroteo, las autoridades han desmentido rumores según los cuales Craddock había sido despedido justo antes del ataque.
“No fue despedido, y no iba a ser despedido”, insistió Hansen. “De acuerdo a lo que sé, el trabajo del autor (de los disparos) era satisfactorio, era bien visto por su departamento y no tenía ninguna disciplinaria en curso”.
La policía del estado de Virginia en la escena del tiroteo en el centro municipal el 1 de junio de 2019 en Virginia Beach. Foto: AFP
Las dudas persisten sobre las motivaciones de Craddock, un hombre de unos 40 años que pertenecía desde hacía 15 al servicio de obras públicas de Virginia Beach.
Los tiros comenzaron hacia las 16:00 del viernes en un edificio municipal, cuando Craddock disparó a todas las personas que halló a su paso.
Once de sus 12 víctimas eran empleadas de la municipalidad de esta ciudad de 450 000 habitantes ubicado al sur de Washington, donde está emplazada también una importante base de la Marina de Estados Unidos.
Cuatro personas resultaron heridas, tres de ellas de gravedad.
Craddock estaba armado con dos pistolas calibre 45 adquiridas legalmente en 2016 y en 2018 según la policía. Otras dos armas fueron halladas en el domicilio del atacante.