Nagorno-Karabakh bordea la crisis humanitaria ante la precariedad del alto el fuego entre Armenia y Azerbaiyán

Un hombre retira los restos de una ventana rota tras un bombardeo reciente durante el conflico desatado por la región de Nagorno-Karabakh en Stepanakert, el 13 de octubre de 2020.

Un hombre retira los restos de una ventana rota tras un bombardeo reciente durante el conflico desatado por la región de Nagorno-Karabakh en Stepanakert, el 13 de octubre de 2020.

Un hombre retira los restos de una ventana rota tras un bombardeo reciente durante el conflico desatado por la región de Nagorno-Karabakh en Stepanakert, el 13 de octubre de 2020. Foto: Reuters

Armenia y Azerbaiyán se acusaron mutuamente el martes 14 de octubre de 2020 de violar un alto el fuego acordado hace tres días para frenar la lucha por el enclave de Nagorno-Karabaj, lo que provocó advertencias de entidades internacionales sobre una crisis humanitaria.

La tregua negociada por Rusia se está viniendo abajo a pesar de las crecientes peticiones de las potencias mundiales para que se detengan los combates. Entre las figuras que han instado a un mayor compromiso con los términos del alto el fuego se encuentra el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo.

Turquía y Armenia intercambiaron recriminaciones, culpándose mutuamente de exacerbar la crisis en torno a Nagorno-Karabaj (también denominado Alto Karabaj en español), reconocido internacionalmente como parte de Azerbaiyán pero gobernado y poblado por armenios étnicos.

El martes, un cámara de Reuters fue testigo de un bombardeo en la ciudad de Martuni, en Nagorno-Karabakh. Un equipo de televisión de Reuters en Terter, Azerbaiyán, también dijo que el centro de la ciudad estaba siendo bombardeado.

Azerbaiyán acusó a Armenia de "violar gravemente la tregua humanitaria", acordada el sábado para permitir a las partes intercambiar prisioneros y restos mortales.

El portavoz del Ministerio de Defensa azerí, Vagif Dargiahly, dijo que Armenia estaba bombardeando los territorios azerbaiyanos de Goranboy y Aghdam, así como Terter. Las fuerzas azeríes no estaban violando la tregua, según Dargiahly.

Por su parte, la portavoz del Ministerio de Defensa armenio, Shushan Stepanyan, negó las acusaciones. Dijo que Azerbaiyán había reanudado las operaciones militares "con el apoyo de fuego de artillería activo en las direcciones meridional, septentrional, nororiental y oriental".

Los combates, que estallaron el 27 de septiembre, son los peores desde la guerra de 1991-1994 sobre Nagorno-Karabaj, en la que murieron unas 30 000 personas. La situación se está siguiendo de cerca en el extranjero por temor a que Rusia y Turquía se sumen al conflicto. Rusia tiene un pacto de defensa con Armenia, mientras que Turquía es aliada de Azerbaiyán.

Suplementos digitales