Una de las prioridades de la política exterior del Gobierno es la situación de los ecuatorianos que viven en España, por el desempleo y la crisis hipotecaria.
De hecho ese será uno de los ejes de la gestión de la nueva embajadora Aminta Buenaño, que este martes próximo presentará sus credenciales en España ante el rey Juan Carlos.
Una de las acciones anunciadas por Buenaño es la ejecución de un convenio con la Defensoría del Pueblo de Ecuador. para la contratación de abogados especializados en hipotecas, que asesoren a los compatriotas afectados.
Así, Buenaño seguirá la directriz del cancilller Ricardo Patiño, quien estuvo en octubre pasado en España y exteriorizó la preocupación del Gobierno por el desempleo y las dificultades que enfrentan los ecuatorianos para pagar las hipotecas de viviendas que estaban adquiriendo.
En España, la legislación española no contempla la dación de la vivienda como pago, por lo que pese a perderla, la persona desahuciada sigue manteniendo la deuda.
Según datos oficiales, en el 2011 hubo 3 000 desahucios y registros anteriores señalan la existencia de 8 000 procesos hipotecarios.
Algo más de 359 000 ecuatorianos estaban censados en España a inicios del año pasado. Un año antes fueron censados 400 000, según el Instituto Nacional de Estadísticas.