Funcionarios de aduana del aeropuerto de Fráncfort frenaron el envío de equipamiento de la marca Siemens presuntamente destinado a un reactor nuclear iraní, informó ayer la prensa en Alemania.
Según el semanario Der Spiegel, se trata de un interruptor, partes de otro y módulos de rastrillaje para el reactor nuclear en la ciudad de Bushehr, en Irán, adonde debían llegar vía Moscú.
La empresa Siemens comunicó que mantiene su decisión, comunicada ya en enero, de retirarse de Irán. En la empresa no hay indicios de que se hayan “contrariado las disposiciones de la empresa y de que se trate de un envío directo de Siemens”, señaló el director de la compañía responsable de los negocios en el área, Siegfried Russwurm. Según Der Spiegel, los equipos debían llegar a una filial de la empresa rusa Atomstroyexport, especializada en elementos nucleares, que actualmente se encarga de montar las instalaciones en Irán.
Dado que en opinión de las autoridades alemanas el envío de los elementos habría violado las condiciones del embargo que la Unión Europea (UE) impuso a Irán, los funcionarios de aduana lo impidieron. Una portavoz de Atomstroyexport confirmó lo sucedido, pero no hizo más comentarios al respecto.
La aduana de Alemania frenó ya media docena de envíos similares de diversa procedencia desde fines del año anterior. La mayor parte de ellos iba a pasar por Rusia antes de llegar a Irán.