Imagen tomada de la cuenta de PlayGround de Facebook sobre autodefensa de hiyab
Las musulmanas que residen en EE.UU. han decidido defenderse. Y han empezado a tomar clases de defensa personal como una forma de resguardarse de los crecientes ataques violentos con tintes xenófobo y religioso.
La idea surgió a raíz de la proliferación de actos vandálicos en contra de las minorías en EE.UU., tras la victoria en la elección presidencial del magnate republicano Donald Trump. Según la ONG Southern Poverty Law Center hubo 869 ataques de odio luego de haberse confirmado a Trump como el próximo presidente electo de Estados Unidos.
¿Cómo son las clases?
En un video de PlayGround se observa a una joven musulmana explicar ejercicios de defensa ante un posible ataque islamofóbico y machista, ya que generalmente los blancos de agresión son mujeres debido a su vestimenta. La instructora explica cómo controlar al atacante con llaves, patadas y giros corporales.
Las agresiones van desde insultos a violencia física y simbólica. Uno de los actos vandálicos más comunes es arrancar el Hiyab (velo tradicional) que utilizan las mujeres.
Una de las víctimas de la islamofobia fue, por ejemplo, Ilhan Omar. Ella es la primera parlamentaria estadounidense de confesión musulmana. De origen somalí, denunció en su página de Facebook haber sido blanco de una diatriba “de odio” e “islamofobia” por parte de un conductor de taxi en Washington.
Exrefugiada y con un hiyab que cubre su cabello, Ilhan Omar ganó el 8 de noviembre un escaño en la Cámara de Representantes por el estado de Minnesota, una novedad para EE.UU.
La parlamentaria contó que fue víctima de “provocaciones y amenazas” en su camino de vuelta al hotel después de haber participado de reuniones en la Casa Blanca, según publicó en Facebook. “Subí a un taxi y fui blanco de las provocaciones y amenazas de lo más rencorosas, maleducadas, islamofóbicas y sexistas jamás escuchadas”, denunció. “El conductor del taxi me acusó de (pertenecer al grupo) Estado Islámico y me amenazó con sacarme el velo”, continuó.
Omar relató que abandonó rápidamente el auto y agregó que tenía intenciones de denunciar el incidente ni bien volviera a Minneapolis, pero prefirió esperar ya que el conductor sabe dónde reside en Washington.
Otro caso sonado fue el ataque a una estudiante de la Universidad Estatal de San Diego. La joven fue abordada por dos hombre que hicieron mención de la victoria del candidato Trump y lo peligrosa que es la comunidad musulmana. Los individuos robaron las pertenencias de la chica, entre las que se encontraban las llaves de su auto.
Previamente, los atentados del 11 de septiembre del 2001
(11-S) habían disparado una ola de islamofobia en Estados Unidos. Estos actos de odio se han renovado debido a varios factores, entre los cuales destacan: Los actos terroristas del Estado Islámico alrededor del mundo y también por el triunfo de Trump, quien durante la campaña electoral lanzó ataques de índole racista a los inmigrantes, en especial a los mexicanos y a quienes profesan la fe islámica.