Las mujeres agredidas, por el equipo de seguridad del presidente turco Erdogan, denunciaron la represión de la que fueron víctimas el pasado 4 de febrero del 2016. Foto: Pavel Calahorrano/ EL COMERCIO
La noticia difundida por Teleamazonas de que el gremio de empresarios turcos en América Latina habría presentado una denuncia en contra de dos de las manifestantes que fueron agredidas la tarde de este jueves 5 de febrero del 2016 causa revuelo en redes sociales.
Sin embargo, ninguna de las siete mujeres agredidas recibe todavía una notificación sobre esta demanda que, según Cenk Gül, secretario general de esta agrupación, se dará porque las manifestantes no tendrían una base para probar que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan sea “un asesino”, como lo repitieron las activistas durante su conferencia magistral en el Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), en el norte de Quito.
Karla Kalapaqui, quien aparece en un video siendo atrapada por los miembros de la seguridad de Erdogan, quienes le tapan la boca, la halan y la golpean, informó que esperarán una notificación oficial para iniciar, de ser necesario, su defensa.
Para el efecto conversaron ya con un defensor y pedirán ayuda al Colegio de Abogados para enfrentar el proceso. “Yo creo que esta es una decisión colectiva de las siete mujeres, conjuntamente con la plataforma y el movimiento de mujeres frente a lo evidente, si es que ya se pone la denuncia en la Fiscalía. Hasta el momento no hemos sido notificadas pero vamos a emprender acciones de defensa la próxima semana, si hace falta, pero además para exigir respuestas”, dijo.
Agregó que este viernes 5 de febrero del 2016, en una reunión que mantuvieron después de ofrecer una rueda de prensa, para relatar las agresiones de las que fueron víctimas, resolvieron presentar una demanda en la Fiscalía la próxima semana, en contra de los miembros de la guardia de Erdogan.
Además, presentarán un informe ante ONU-Mujeres, la unidad de la Organización de Naciones Unidas, como un inicio de sus acciones internacionales para protestar por el maltrato que recibieron durante su protesta.
Kalapaqui aseguró que el grupo de mujeres no insultó al Presidente turco, sino que le hizo duros cuestionamientos en el ámbito político, por “su violación a los derechos humanos en su país” y “la demostración de la violación a los derechos humanos aquí. Salimos agredidas por ejercer nuestro derecho de expresarnos en nuestro país”, dijo.