Agentes de Tránsito acudieron al lugar del accidente, en la avenida Mariscal Sucre (sur de Quito), donde falleció una mujer. Foto: Vicente Costales/ EL COMERCIO
El sombrero de Rosa María Oña quedó al borde de la vía. La mujer de 61 años murió, el viernes 17 de junio del 2016 tras ser atropellada por un bus del servicio público en el sur de Quito. El conductor fue detenido.
Se conoció que la víctima pertenecía a la comunidad Sarausha de Saquilisí (Cotopaxi). Nueve familiares rompieron en llanto cuando se acercaron al cadáver que estaba tendido en la intersección de la avenida Mariscal Sucre y Tabiazo.
Una funda negra tapaba el cuerpo de la mujer. En los alrededores estaban esparcidas las prendas de vestir. Un chal anaranjado y los zapatos negros cubiertos de tierra fueron recogidos por los familiares. Cuando tuvieron las prendas en las manos, dos mujeres lloraron y se lamentaron con una suerte de canto en quechua.
Luis Colcha, suboficial del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT), reseñó que el conductor del bus de la cooperativa San Francisco, que circulaba en sentido norte sur por el carril exclusivo del Corredor Sur Oriental, impactó frontalmente a la mujer.
Colcha detalló que el conductor tenía los documentos en regla y que, de acuerdo con los resultados de la prueba de alcohol, no se encontraba en estado etílico.
El agente de Tránsito Hugo Castro, indicó que todo será parte de un proceso que se inició por el caso. El conductor fue aprehendido y el vehículo fue a los patios de retención de la Agencia Metropolitana de Tránsito en Calderón.