El Ejecutivo de Nayib Bukele ha implementado desde el 20 de junio un plan para tratar de recuperar los territorios controlados por las pandillas y disputarles el reclutamiento de los jóvenes. Foto: AFP
Al menos tres supuestos pandilleros murieron este sábado 13 de julio de 2019 en El Salvador durante un tiroteo con agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) en el oeste del país, informó la Fiscalía General de la República (FGR).
La fuente, que no precisó las identidades de los fallecidos ni la estructura a la que supuestamente pertenecen, indicó que las muertes se registraron en el municipio de San Antonio del Monte, del occidental departamento de Sonsonate.
Detalló que la reyerta se dio después de que los fallecidos supuestamente atacaron a los agentes policiales con armas de fuego, mismas que fueron localizadas “cerca de los cadáveres”.
Este tiroteo se suman a los 105 enfrentamientos entre policías y pandilleros registrados en 2019, un 25 % menos que los 140 computados en 2018, según datos de la PNC dados en abril pasado.
Las autoridades de seguridad que asumieron el 1 de junio se han negado constantemente a revelar las cifras consolidadas de los homicidios, pese a las solicitudes de la prensa.
Según el exministro de la Defensa, David Munguía Payés, el país vive un conflicto armado de “baja intensidad” por los constantes enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y las estructuras criminales.
Las autoridades de El Salvador responsabilizan a las pandillas MS13, Barrio 18 y otras minoritarias de los altos índices de homicidios, de entre 103 y 50,3 por cada 100 000 habitantes entre 2015 y 2018, cifras que ponen a la nación como una de las más violentas del mundo.
Las pandillas, un fenómeno considerado como herencia de la guerra civil (1980-1992) y que se fortaleció con la deportación de pandilleros de Estados Unidos, han resistido a los planes de seguridad implementados en las últimas cuatro administraciones.
El Ejecutivo de Nayib Bukele implementa desde el 20 de junio un plan para tratar de recuperar los territorios controlados por las pandillas y disputarles el reclutamiento de los jóvenes.
El Gobierno pidió recientemente al Congreso 91 millones de dólares para proyectos de educación, salud, empleo, becas, deporte, arte, agua potable y vivienda, que ejecutará la dirección de la Unidad de Reconstrucción de Tejido Social en comunidades con presencia de pandillas.