Foto de archivo tomada el 11 de octubre de 2008 del entonces presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva (izq) y su esposa Marisa Leticia Rocco tras depositar una corona de flores ante el monumento al Soldado Desconocido en Roma (Italia). Foto: EFE
La esposa del ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, Marisa Letícia Rocco, murió hoy (3 de febrero del 2017) en Sao Paulo como consecuencia de un derrame cerebral que sufrió días atrás, según confirmó el Instituto Lula.
“Maria Letícia falleció hoy”, escribió también la cuenta de Lula en Twitter para confirmar el deceso al final de la tarde. La ex primera dama, de 66 años, estaba en situación de muerte cerebral desde el jueves en el Hospital Sirio-Libanés de Sao Paulo, después de haber sido internada el 24 de enero debido a un derrame cerebral sufrido por la ruptura de un aneurisma.
Marisa Letícia será velada mañana sábado en el Sindicato de los Metalúrgicos ubicado en la región industrial de Sao Paulo conocida como ABC, donde la pareja se había conocido 44 años atrás.
Fotografía del 2 de febrero de 2017, del presidente de Brasil, Michel Temer (i), presenta sus condolencias al expresidente, Luiz Inácio Lula da Silva (d), cuya esposa, Marisa Leticia Rocco, fue diagnosticada con muerte cerebral, en Sao Paulo (Brasil). Foto: EFE
Numerosos políticos, entre ellos el actual presidente, Michel Temer, visitaron a Lula desde el jueves en el hospital para presentarle sus condolencias después de que se diera a conocer la muerte cerebral de su esposa.
La ex presidenta y discípula de Lula en el Partido de los Trabajadores (PT), Dilma Rousseff, acudió en la mañana de hoy al hospital a darle su pésame a su mentor político.
Marisa Letícia y Lula se casaron en segundas nupcias en 1974 después de conocerse en el sindicato metalúrgico paulista, ambos como jóvenes viudos, y tuvieron tres hijos juntos.
Ambos tenían un hijo cada uno de relaciones anteriores. De orígenes pobres y descendiente de inmigrantes italianos asentados en el estado de Sao Paulo, Marisa Letícia acompañó a Lula durante toda su trayectoria política desde sus inicios como sindicalista obrero en los años 70 hasta su llegada a la presidencia en 2003.
La esposa de Lula participó también en la fundación del PT en 1980. La casa de la pareja en Sao Paulo albergaba en esa época a menudo reuniones de sindicalistas y opositores a la dictadura brasileña (1964-1985).
Lula la llamaba cariñosamente “galega” (“gallega”), como se denomina a las personas de piel blanca y ojos claros en varias regiones de Brasil.
La imagen de Marisa Letícia, sin embargo, también resultó afectada por las investigaciones de corrupción política en torno a la petrolera estatal Petrobras, en las que su esposo es uno de los acusados. La ex primera dama estaba acusada junto con Lula de corrupción pasiva y lavado de dinero. El ex mandatario debe ir pronto a juicio por el caso conocido como