Un motociclista fue sancionado el mismo día y por dos ocasiones sin haber sido notificado inmediatamente de las supuestas infracciones, que según él nunca cometió.
El caso ocurrió en Santo Domingo de los Tsáchilas, en el occidente del Ecuador y este caso se conoció cinco meses después de sucedido el hecho.
Todo salió a la luz el lunes 30 de agosto del 2021 cuando un medio de comunicación local difundió en sus redes sociales un oficio en el que César Totoy, el hombre afectado, pide a la Empresa de Transporte Municipal de Santo Domingo que se le retiren esas multas porque desconocía sobre su existencia, ya que nunca se las notificaron, ni incurrió en esas.
Según Totoy, recién logró conocer sobre esta situación después que lo llamaron desde esa entidad para informarle que debía cancelar ambas multas por alrededor de USD 80 y con la pérdida de seis puntos a su licencia de conducir.
La infracción más curiosa y la que motivó el reclamo del motorizado es por no usar el cinturón de seguridad en su motocicleta.
De acuerdo con la notificación, que consta en la página web de la Agencia Nacional de Tránsito, la supuesta infracción se registró en las calles Ambato y Portoviejo, en el centro de Santo Domingo.
La fecha que se cita es el 11 de abril de 2021, a las 12:09. El artículo 392, literal 6, de la Ley de Tránsito, sanciona esta contravención con la pérdida de 1,5 puntos y al pago de USD 20.
La otra infracción está registrada el mismo 11 de abril de 2021 a las 10:22 por conducir supuestamente en sentido contrario.
La normativa de tránsito penaliza esta contravención con menos 4,5 puntos a la licencia y USD 60 de sanción.
Totoy habló con este Diario aclarando que en ningún momento hizo pública su situación porque todo lo dejó en “manos de Dios”. Antes había consultado con un abogado sobre la posibilidad de que se le eliminaran esas infracciones.
Pero lo hizo en un tiempo no prudencial ya que el defensor le hizo notar que debía apelar en los tres días siguientes.
No obstante, Totoy dice que no fue posible proceder de esa forma porque no contaba con un documento físico ni una notificación formal para presentar su queja ante un Juez e insiste que tampoco conocía que había sido sancionado.
El motorizado, que se dedica al comercio en la tierra Tsáchila, finalmente tuvo que pagar las dos multas. Esto, porque ya había iniciado anteriormente el trámite para renovar su licencia de conducir, la cual la requería con urgencia para movilizarse a su puesto de trabajo en tiempos en los que las restricciones por la pandemia estaban en vigencia.
El comerciante hizo un llamado a las autoridades para que en futuras ocasiones tomen en cuenta correctamente a quiénes sancionan. Él cree que la agente que lo multó se habría inventado esos procedimientos. “Me han dicho que denuncie a la agente. Pero no lo haré porque yo no soy persona de mal, solo me encomiendo a Dios para que todo fluya”. Igual ya perdí todo”.
La Empresa de Transporte de Santo Domingo no ha emitido un pronunciamiento al respecto de este caso.