El monasterio de las Cuevas cuenta con unos 250 monjes, 30 de los cuales están contagiados con covid-19. Foto: AFP
Un famoso monasterio ortodoxo en pleno centro de Kiev, que había desoído las medidas de lucha contra el covid-19, se convirtió en un foco de infección en Ucrania con una treintena de contagios, según un balance del ayuntamiento.
Desde el miércoles 8 de abril del 2020, se confirmaron nuevos 26 casos en el Monasterio de las Cuevas de Kiev, que se añaden a los cuatro primeros que ya se habían detectado, anunció el alcalde de la capital ucraniana, Vitali Klichko.
El monasterio, fundado en el siglo XI y sede de la Iglesia ortodoxa ucraniana adscrita al patriarcado de Moscú, cuenta con unos 250 monjes, según uno de sus responsables.
Ni el ayuntamiento ni el monasterio, cerrado debido a los contagios, han comunicado detalles sobre la identidad, edad o estado de los enfermos.
Este monasterio había desoído a los llamados de las autoridades a suspender las liturgias para limitar la propagaciones del virus.
En marzo, cuando el gobierno anunció el cierre de las escuelas, espacios públicos y transportes, el jefe del convento, el metropolitano Paul, pidió a los fieles “precipitarse a las iglesias”, que no tuvieran “miedo de nada” y que se dieran “abrazos”.
“No somos ángeles, también podemos enfermar”, comentó monseñor Paul en la televisión esta semana, sin confirmar ni desmentir los rumores sobre su propio contagio.
El superior de otro convento ortodoxo, que pertenece a la misma Iglesia en Kiev, anunció este jueves 9 de abril en Facebook que había dado positivo en coronavirus.
El ministerio de Cultura expresó su “preocupación” por la celebración de la Pascua ortodoxa el domingo 19 de abril.
Las autoridades exhortaron a organizar los oficios a través de internet y a limitar la presencia del clero. Igualmente pidieron a los eclesiásticos que usaran mascarillas durante las ceremonias.
El servicio de correos comunicó por su parte que repartiría de manera gratuita a los ucranianos los tradicionales pasteles de Pascua.