Tegucigalpa, DPA
Miles de hondureños salieron hoy a las calles para rechazar el retorno del defenestrado presidente Manuel Zelaya, apoyar al gobierno interino y respaldar la acción de los militares que arrestaron y sacaron del país a Zelaya.
En Tegucigalpa, la capital del país, y San Pedro Sula, a 250 kilómetros al norte, decenas de miles se concentraron alrededor de la plaza central de las ciudades con vestidos de blanco para simbolizar que apostaban a la paz.
El presidente interino Roberto Micheletti apareció en la plaza junto al jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, general Romeo Vásquez Velásquez, para agradecer a los manifestantes.
Es la primera vez que aparece en público el jefe militar desde que sus subalternos arrestaron y expulsaron de Honduras a Zelaya. Micheletti agradeció a los gremios de la sociedad civil por apoyar su gestión y al ejército.
El gobernante interino dijo que se encuentran “reunidos para decir no” a la ilegalidad de Zelaya y decirle no al mandatario venezolano Hugo Chávez ante las amenazas de que lo derrocará.
Por su lado el jefe militar, el más vitoreado de los oradores, dijo que las “Fuerzas Armadas lo único que hicieron fue cumplir con su deber constitucional”, a lo que los asistentes le respondieron con “muchas gracias”.
Vásquez Velásquez pidió a todos los sectores que apoyen al gobierno constitucional designado por el Congreso. La multitud le contestó a coro: “Tenemos Fuerzas Armadas”.
Las marchas fueron convocadas por la Unión Civica Democrática, una coalición de organismos sociales e iglesias cristianas que se vienen oponiendo a Zelaya desde hace meses, especialmente por su proyecto de convocar a una asamblea constituyente y reformar la Constitución que promovería el continuismo y la reelección.
Los manifestantes corearon consignas como “que no vuelva (Mel)”. “fuera Mel”, “defenderemos nuestra Constitución”, “no hubo golpe, él se cayó” en referencia a Zelaya, que en Honduras es conocido popularmente por el sobrenombre que utilizó en su campaña electoral de “Mel”.
En referencia al aislamiento internacional a que se encuentra sometida la administración vigente, los asistentes proclamaron “mejor vivir aislado, que sometido a Mel y (al presidente venezolano Hugo) Chávez”.
El pastor de la iglesia evangélica “Vida Abundante”, Evelio Reyes, recordó que hace algunas semanas “alerté a la iglesia y la sociedad en general, cuando vi con mis propios ojos y oí con mis propios oídos decir al ex presiente que a él nadie lo iba a detener”.
El pastor Reyes dijo que “esa actitud y esa conducta no se pueden tolerar”, y señaló que en ningún país del mundo se pueden tolerar ese “tipo de barbaridades” y en Honduras tampoco porque “tenemos dignidad”.
Por su lado Jorge Yllescas, activista social y dirigente del oficialista Partido Liberal, dijo que si “Mel pone un pie en esta tierra será capturadao”, porque “está acusado de 18 delitos contra la patria”. Ataques contra Chávez y sus aliados de Ecuador, Bolivia y Nicaragua fueron comunes durante las tres horas de la manifestación.