El presidente estadounidense, Barack Obama (i), recibe al papa Francisco (i) hoy, martes 22 de septiembre de 2015, en la base aérea de Andrews, Marylan. Foto: Olivier Douliery / EFE
El papa Francisco llegó hoy, 22 de septiembre de 2015, a Estados Unidos después de cuatro días en Cuba, la segunda etapa de un viaje de gran simbolismo por el papel que ha desempeñado en la reconciliación entre los dos países.
El Airbus A330-200 de la compañía Alitalia en el que viaja el papa aterrizó a las 15:50 hora local (19.50 GMT) en la base aérea de Andrews (Maryland), donde le recibieron el presidente de EE.UU., Barack Obama, y su esposa, Michelle, acompañados de sus hijas, Sasha y Malia.
Obama y el papa se saludaron con un largo apretón de manos, y después fue el turno de Michelle, sus hijas, su madre, Marian Robinson, así como del vicepresidente, Joseph Biden, su esposa, Jill, y dos de sus nietas.
Varios centenares de personas esperaban al papa en la base desde hacía varias horas y lo recibieron al grito de “Francisco, Francisco” y “Se nota, se siente, el papa está presente”, en español.
La migración hace aumentar número de católicos en EE.UU.
Los católicos en Estados Unidos, que esta semana reciben la visita del papa Francisco, representan entre un 20 y 25% de la población, con un aumento los últimos años provocado por la migración, según un censo de la universidad Georgetown de Washington.
En 2015 los católicos suman 81,6 millones en Estados Unidos, incluyendo a aquellos que se declaran como tales aunque no van a la misa dominical, según un censo realizado por el Centro de Investigación Aplicadas (Cara) de esa universidad.
Si se toma un censo realizado con un conteo parroquia por parroquia, la cifra es un poco menor sumando 68,1 millones, es decir 20% de la población.
Sólo el 25% de los católicos asisten a la iglesia al menos una vez por semana, una cifra que ha permanecido estable en los últimos 20 años. El 38% asegura que va a un templo al menos una vez al mes.
“Este es un grupo de fieles muy importante” comparado con los protestantes que, ciertamente, representan más de la mitad de la población pero están repartidos en numerosas iglesias, señaló a la AFP Mary Gautier, investigadora de Cara.
A los creyentes cristianos le siguen en número los judíos y musulmanes, respectivamente.
El 38% de los católicos estadounidenses son de origen latinoamericano, 3% son negros y 3% asiáticos. La iglesia Católica estadounidense es la más diversa en “términos de razas y de diversidad étnica”, según Gautier.
El número de fieles aumenta cada año cerca de 1% “en parte debido a la inmigración y en parte a la natalidad”.
Por el contrario, el número de sacerdotes es ahora apenas de 37 600 contra más de 50 000 en 1995. Es una cifra que representa una tercera parte de las necesidades de la Iglesia.
En términos de vocaciones, el número de seminaristas “permanece estable” en los últimos 15 años.
El número de parroquias es de 17.300 este año, una cifra que va en baja desde los años sesenta pues muchos templos que estaban en bastiones de la inmigración católica europea, especialmente en el noreste y centro de Estados Unidos, cerraron sus puertas.
Por el contrario, las parroquias ubicadas en zonas del sur y del oeste irrigadas por la llegada de numerosos migrantes latinoamericanos “están llenas hasta el tope”.