Redacción Esmeraldas
En el horno industrial de la empresa de aglomerados Codesa, ubicada en la capital de Esmeraldas, se quemó ayer media tonelada de clorhidrato de cocaína.
Este estupefaciente es parte de la operación Furgón, que se realizó en esa ciudad. En el operativo se decomisó una tonelada de clorhidrato de cocaína, recordó el mayor Enrique Bautista, jefe de la Dirección Antinarcóticos.
“Esta droga era trasladada en un tráiler desde San Lorenzo a Guayaquil, pero fue interceptada. El chofer, que era colombiano, fue el único detenido”, sostuvo el oficial.
Según Plutarco Benavides, director del Consejo Nacional de Sustancias Estupefacientes y Psicotrópicas (Consep) de Esmeraldas, se decidió destruir el alcaloide en Esmeraldas, porque no se la puede movilizar a Guayaquil, donde se queman regularmente las drogas confiscadas. El motivo es que el aeropuerto de Esmeraldas continúa cerrado.
Benavides aseguró que próximamente se quemará la media tonelada restante. Pero no reveló el día, por seguridad. Además, tampoco se aclaró si se lo hará nuevamente en Esmeraldas o en Guayaquil.
A la destrucción del clorhidrato de cocaína también asistieron representantes de la Fiscalía, de la Corte de Justicia Provincial, de la Policía Antinarcóticos y del Consep.