Redacción Negocios
Mañana vence el plazo para que las empresas repartan las utilidades entre sus empleados. Según la Superintendencia de Compañías, un total de 44 549 sociedades emitieron sus balances en el 2008, repartiendo USD 1187,3 millones. Ese valor fue mayor a los USD 314,3 millones distribuidos durante el ejercicio del 2007.
Para este año, las previsiones sobre el reparto de utilidades no son alentadoras, debido a que el 2009 fue de menor actividad.
Según el experto en Recursos Humanos Fabricio Alarcón, las proyecciones para este año son significativamente menores. “Fue un año de crisis. Las empresas no están
cerrando bien. Y de las que han ganado, muchas no repartirán en las mismas cantidades del 2008. Es más, tendrán que repartir las ganancias entre más personas, debido a la incorporación del personal tercerizado, que pasó a nómina tras la ejecución del Mandato 8”.
Ese es el caso de una compañía fabricante de productos de limpieza. “El año pasado pagamos alrededor de USD 240 por empleado. Este año, las utilidades se han reducido a USD 160.
Afortunadamente, nos recuperamos en los últimos meses del año, porque si no hubiéramos tenido pérdidas”, señaló uno de sus ejecutivos que pidió no ser citado.
Una empresa petrolera, que prefirió también la reserva de su nombre, aseguró que las utilidades que recibieron sus trabajadores fueron de USD 16 000 por persona, la cuarta parte de lo que captaron el año pasado. “Esto fue producto de la caída de la producción de los pozos y la paralización de las inversiones debido al proceso de renegociación de los contratos petroleros”, aseguró uno de sus voceros.
Dentro de esta depresión del monto a repartir, hay sectores especialmente más vulnerables. Uno de ellos es el agrícola, que ya vio disminuir sus ganancias en 2008, a pesar de que fue un año de bonanza económica.
Para el catedrático universitario en temas agrícolas, Rodrigo Pérez, las relaciones en el campo aún son precarias en el país. “El hecho de tener una economía eminentemente agrícola en lo productivo y observar rentabilidades tan bajas dan muestras de dos fenómenos: uno, la vulnerabilidad del sector ante los fenómenos naturales y, dos, la informalidad y aún inequitativa distribución en el campo”.
Bolívar Cevallos, presidente de la Cámara Nacional de Agricultura, aseguró que este año pocas empresas pertenecientes a este sector tuvieron utilidades. “La crisis financiera golpeó a las empresas que producen para exportar, principalmente a las de flores y brócoli. Fue muy grave la depresión de los mercados de Rusia y los Estados Unidos”.
Para el dirigente gremial, el descalabro en el sector no fue mayor gracias a las buenas ventas de banano y cacao. “Sin embargo, eso no implica que haya utilidades sino que las compañías lograron mantenerse”.
La misma situación se vive en el sector de la ganadería. Según Víctor López, vicepresidente de la Asociación de Ganaderos de la Sierra y Oriente (AGSO), este año las utilidades serán muy bajas para las pocas empresas que logren generar. “El monto de utilidades para mis 10 trabajadores se redujo en un 2% con respecto al 2008. No es que no tengamos conciencia social para no pagar más, sino que la situación económica nos golpeó”.
Pero no todas perdieron. En lo que se refiere a las comercializadoras de combustible la utilidad bruta se incrementó. Es el caso de Mas Gas, cuyas ganancias subieron 18%, debido al incremento del parque automotor.