París, AFP
Al menos 53 muertos, de los cuales 45 solo en Francia, dejaba hasta ayer la tormenta Xynthia, que con fuertes vientos y mareas barre desde el sábado a Europa occidental causando inundaciones y cortes de electricidad.
Francia, es el país más castigado por la tormenta, una de las más violentas desde la de diciembre de 1999, que dejó 92 víctimas. El primer ministro, François Fillon, calificó a la tempestad de “catástrofe nacional” y dijo que el restablecimiento de la electricidad demorará “varios días”, tras una reunión de crisis con varios ministros.
Las autoridades francesas pedirán hoy que la Unión Europea otorgue una partida especial de su fondo de solidaridad para ayudar al país a hacer frente a los estragos que causó la tormenta.
Ayer en la mañana, un millón de hogares estaba sin electricidad. A las 18:00, la cifra bajó a 500 000. El departamento más afectado fue Vendée (oeste), con un balance provisional de 30 muertos, según la prefectura.
La tempestad, que se formó en el Atlántico, llegó el sábado al litoral portugués con menos violencia que lo previsto, pero un niño murió aplastado por un árbol en Paredes (noroeste). En España dejó tres muertos.
Ayer por la tarde la tormenta salió de Francia, camino de Bélgica, Alemania y Escandinavia. Bélgica lamentó su primer fallecido. En Alemania, en donde soplaron vientos de hasta 110 km/h, tres personas murieron.
En Suiza los vientos llegaron hasta los 160 km/h, pero no se registraron víctimas. La tormenta perturbó el transporte aéreo y ferroviario. Ayer, Air France anuló más de 100 vuelos. El tráfico regresó progresivamente anoche. En el aeropuerto de Francfort más de 200 vuelos se anularon. La estación central de ferrocarriles se cerró.