Una protesta contra el Mundial de fútbol de Brasil 2014 terminó hoy (13 de junio del 2014) con violentos enfrentamientos entre manifestantes y policías en Salvador, sede de seis partidos durante el certamen.
Cerca de un centenar de personas marcharon por las calles céntricas de la ciudad, a unos dos kilómetros del estadio mundialista Fonte Nova, en el que hoy jugaron España y Holanda.
Según la policía militarizada, unas cinco personas fueron detenidas durante los disturbios, que comenzaron cuando los activistas intentaron romper el cordón policial que cercaba las inmediaciones del Faro de la Barra, donde se desarrollaba la Fan Fest.
La policía reprimió con bombas de gas lacrimógeno a los manifestantes, que respondieron arrojando piedras contra los efectivos. Además del choque de hoy, en el que Holanda arrolló a la actual campeona del mundo por 5-1, la arena recibirá otros cinco partidos durante la cita.