Al juez Magno Borja le tomó un abrir y cerrar de ojos disponer la prohibición de salida del país del ex jefe de la extinta Unidad de Investigaciones Especiales de la Policía (UIES), Manuel Silva.
Borja está a cargo del juzgado Tercero de lo Penal de Quito y convocó ayer a una audiencia de confrontación de cargos contra el uniformado, quien es indagado por la supuesta entrega de información de la UIES a EE.UU.
La diligencia empezó a las 08:30. Silva no se presentó pero fue su abogado, Ramiro Aguilar, y algunos de sus familiares.
El primero que tomó la palabra fue el fiscal Nelson de La Cadena . Él argumentó por qué se inició la instrucción fiscal al ex comandante de la UIES. Habló por 50 minutos y resumió todas las actividades que realizó: recepción de versiones de agentes policiales y de certificados de peritos. Y pidió que se ordene la prohibición de salir del país para Silva y que se disponga que se presente periódicamente ante una autoridad.
Aguilar dijo que esas medidas son exageradas, porque Silva tiene protección policial y no podría salir a escondidas del país. Esa vigilancia se autorizó porque el Grupo de Intervención y Rescate de la Policía presentó un informe que decía que su vida corría peligro por su trabajo contra el narcotráfico y el terrorismo.
Apenas terminó su alegato el abogado, el juez Borja dispuso que se inicie la instrucción fiscal, que se prohíba la salida del país de Silva y que se presente todos lunes, a las 08:30, a su despacho.