El ‘Tren Maya’ es una propuesta de campaña de López Obrador para conectar distintos atractivos turísticos de Yucatán. Foto: EFE
El presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció este lunes 12 de noviembre del 2018, que el 24 y 25 de este mes se realizará una consulta popular para decidir la construcción del llamado ‘Tren Maya‘, un proyecto turístico para fomentar el desarrollo económico de la península de Yucatán.
El futuro mandatario fijó la fecha de la nueva consulta luego de que en otro refrendo, criticado por sus irregularidades, se decidiera cancelar un millonario aeropuerto para Ciudad de México.
El ‘Tren Maya’ es una propuesta de campaña de López Obrador para conectar distintos atractivos turísticos de Yucatán, donde se localizan destinos de playa como Cancún y sitios arqueológicos como Chichén Itza.
“Vamos a llevar a cabo una amplia consulta ciudadana para preguntarles a los mexicanos, no sólo a los habitantes del sureste, sino a todos los mexicanos sobre este proyecto”, dijo López Obrador en declaraciones a la prensa en el aeropuerto de Mérida, en el estado de Yucatán (este).
Al mismo tiempo que anunció la consulta, el izquierdista aseguró que las obras del tren comenzarán el 16 de diciembre, convencido de que será aprobado. “Voy a defender estos proyectos”, dijo.
López Obrador asumirá la presidencia el 1° de diciembre, luego de ganar la elección de julio por una amplia mayoría, y ha advertido que durante su gobierno distintas decisiones se tomarán mediante consultas.
También se dará voz a los ciudadanos en otros programas sociales y proyectos de infraestructura, entre ellos una refinería.
En octubre, el referendo convocado por López Obrador acabó con el millonario proyecto del aeropuerto de Texcoco, en los suburbios de la capital y avanzado 30% en su construcción, al ser rechazado por casi 70% de los votos.
El poco más de un millón de votantes apoyó un proyecto alternativo de López Obrador de adaptar una base militar, que ha sido señalado como inviable por algunos expertos en aviación.
Esta consulta fue duramente criticada por opositores y empresarios, ya que fue realizada por el partido de López Obrador, Morena, y por organizaciones afines, sin que participara autoridad electoral alguna.
En la consulta se corroboraron irregularidades como la posibilidad de votar varias veces, la ausencia de un número controlado de papeletas para sufragar y que los organizadores llevaran las urnas a su casa.
La ley mexicana contempla la consulta popular, organizada por autoridades electorales, pero sólo en comicios federales cada tres años. Para que sea vinculante, se requiere la participación de 40% de los electores registrados, que en los comicios de julio pasado sumaron 89 millones.