El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, ofreció una entrevista en Radio Cristal. Allí hizo un análisis de la situación del país para el año 2016. Foto: cortesía Municipio de Guayaquil
A pesar de las dificultades económicas que avizoran un año 2016 difícil por la baja de los precios internacionales del petróleo, el Municipio de Guayaquil no paralizará ninguna de sus obras ni dejará de cumplir sus compromisos.
Así lo anunció el alcalde Jaime Nebot, este miércoles 9 de diciembre del 2015, durante su habitual cadena radial.
Aunque aclaró que espera equivocarse, vaticinó el 2016 como más difícil que el año que está por culminar, debido a la crisis económica y a las acciones del Gobierno que no generan confianza.
Entre ellas mencionó el anuncio de un nuevo paquete de enmiendas o el de volver a plantear los impuestos de la plusvalía y de la herencia, que despertaron el rechazo ciudadano porque, dijo, se trata de impuestos confiscatorios.
“El Municipio porteño no dejará de ejecutar su cronograma de obras programadas para el 2016, así como todos los compromisos aceptados”, dijo.
Aunque hizo una salvedad: siempre y cuando el Gobierno no retenga los fondos que son recaudados por el Estado y que pertenecen a las ciudades, lo cual, advirtió, sería un delito que despertaría una fuerte reacción en las ciudades afectadas por aquello, si llegara a suceder.
Por ello invitó al Gobierno a actuar coherentemente con el fin de generar confianza en los inversores, nacionales y extranjeros, pues considera la confianza como una percepción imprescindible para generar inversión, progreso, desarrollo y empleo, que es lo que la ciudadanía aspira.
“La labor del gobernante es optimismo, resultados. Pero eso se hace con constancia, con el mensaje correcto, con la actitud correcta, con la esperanza convertida en fe y con la fe convertida en realidad, en crecimiento, en empleo, en mejoría de la calidad de vida de la gente”, acotó Nebot.
En ese sentido, puso de ejemplo a Guayaquil cuya administración municipal le ha permitido acceder a créditos internacionales como los del Banco Mundial y el Banco Europeo de Inversiones, por más de USD 200 millones de dólares y con condiciones blandas.
Con esos recursos se construirá una de las plantas de tratamiento de aguas negras más modernas de la región y que beneficiará a más de un millón de personas en el sur de la ciudad.
También anunció otras obras como el nuevo puente sobre el río Daule que unirá a Samborondón con Guayaquil, cuyo plazo de ejecución está planteado en 18 meses; el proceso de licitación para el nuevo modelo de transporte alternativo aéreo suspendido de la Aerovía, para el cual las dos empresas más grandes del mundo en su especialidad han pasado la etapa de mostrar la experiencia que las acredite para su construcción…
Igual pasa, dijo, con los avances en la ampliación de la Metrovía; el desarrollo de todos los planes de viviendas municipales; la construcción del terminal terrestre alterno en la vía a Daule que será inaugurado en enero próximo; la construcción del nuevo centro de recreación con la rueda moscovita de más de 50 metros de altura; los 6 mil puntos de internet gratuita y sin cable del programa Guayaquil Digital…
“De manera que Guayaquil, en ese sentido, puede estar tranquilo. Nuestros programas van a marchar, absolutamente todos, pavimentación popular, regeneración urbana, agua potable, alcantarillado, todos los servicios en educación y en salud; y aparte de esos, van a marchar los grandes compromisos que hicimos en nuestra última campaña”, finalizó.