Varias autoridaes porteñas marcharon hoy (13 de agosto) por las calles de Guayaquil. Foto: Mario Faustos/El Comercio
Llegó a las calles Nueve de Octubre y Boyacá, centro de la urbe porteña, cerca de las 17:50. Entonces cuando su presencia generó algarabía entre manifestantes y ciudadanos que agitaban las banderas de Ecuador y Guayaquil en señal de respaldo a las protestas de este jueves 13 de agosto del 2015 en el país.
Jaime Nebot, alcalde guayaquileño, se sumó a un grupo de simpatizantes de la coalición Madera de Guerrero-Partido Social Cristiano que desde las 14:00 se manifestaban en dicha tradicional esquina del Puerto Principal. A esa hora ya se había cerrado al tránsito ambas calles. Por Boyacá circula el sistema Metrovía.
Luciendo su tradicional guayabera blanca manga larga, el Burgomaestre dio unas inentendibles declaraciones –debido al bullicio- a medios de comunicación. De inmediato inició una caminata acompañado por varias dignidades de su partido como la vicealcaldesa Doménica Tabacchi; los concejales Roberto Gilbert, Manuel Samaniego, Susana González, Luzmila Nicolalde, Grecia Cando, Manuel Samaniego; los asambleístas Cinthya Viteri, Cristina Reyes, Henry Cucalón…
El comienzo de la marcha coincidió con el habitual toque de sirena de las 18:00 del edificio de la Primera Jefatura del Cuerpo de Bomberos. Eso encendió más los ánimos de los cientos de asistentes que gritaban consignas a favor de Nebot y en contra del presidente Rafael Correa y de su gobierno.
Nebot lidero la caminata que –a diferencia de la de Guillermo Lasso (Creo) que avanzó hasta el Malecón 2000- se desvió por la calle Chile. Recorrió hasta 10 de Agosto por donde tomó hasta el edificio municipal luego de caminar por nueve cuadras.
En un alto a la caminata, Nebot dijo a los periodistas que “el pensamiento de los ecuatorianos y guayaquileños hay que hacerlo en la calle, con fuerza, con entereza, con serenidad, en paz y dentro de la ley. Aquí no hay un letrero, un símbolo político partidista. Esto es puro país y pura familia. Nada más”.
El arribo del grupo al Cabildo tomó por sorpresa a los miembros de la Policía Nacional que debieron extremarse para formar un cordón e impedir que los manifestantes continúen hasta la sede de la Gobernación donde se realizaba un festival musical a favor del Gobierno.
Pese a la insistencia de sus seguidores de que de un discurso, Nebot se despidió agitando su mano derecha en alto e ingresó a la sede del Cabildo.
Los manifestantes se mantuvieron en la Plaza de la Administración, dividida por la barrera policial, hasta que Nebot reapareció. Esta vez fue en el balcón del Municipio –en el mismo lugar donde en 1998 león Febres Cordero dio un discurso durante la “marcha de los crespones negros”- donde saludó agitando sus brazos y retirándose luego de tres minutos pese al grito de la gente de que hable.
Más temprano, pasado el mediodía y luego de la sesión del Concejo Cantonal, Nebot manifestó a título personal, y como ciudadano, su total apoyo y solidaridad con los reclamos de los diferentes colectivos realizan a través de un paro nacional. Aclaró que no puede comprometer a la ciudad como alcalde, porque “estaría violando la ley”. Recalcó, siempre como un ciudadano más, el lema del escudo guayaquileño “Guayaquil por la Patria”.
“Es nuestro deseo como ecuatorianos y ciudadanos guayaquileños, expresar nuestro apoyo a las protestas que se dan en Ecuador el día de hoy, y solidarizarnos con muchos de los reclamos, como lo hemos venido haciendo durante los últimos dos meses”, dijo.
Tras reflexionar en que se debe ser solidario cuando una serie de colectivos de distintos sectores del Ecuador hacen reclamos válidos, “estamos en la protesta, y, como corresponde en esta ocasión en que no somos convocantes, nos adherimos, sin ánimo protagónico de figuración y sin discurso, simplemente con nuestra presencia y con nuestro espíritu solidario y frontalmente a favor de la tesis y planteamientos que se reclaman”.