El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, asistió al funeral de Estado de las víctimas del desastre del colapso del puente de Génova, Italia. Foto: EFE
Miles de personas asistieron hoy, sábado 18 de agosto de 2018, al funeral por algunas de las víctimas del derrumbe de un puente en Génova, mientras que según la prensa italiana se consiguió rescatar los últimos cadáveres y la cifra de fallecidos ascendería a 43.
Los servicios de rescate encontraron entre los escombros el cadáver de un hombre y un coche aplastado en el que viajaban una pareja y su hija de nueve años, informó un bombero, Stefano Zanut, al canal SkyTG24.
Las autoridades sólo confirmaron por el momento la muerte del hombre, pero los otros tres cuerpos todavía no fueron identificados. Además, uno de los heridos el martes murió en el hospital, según confirmó un portavoz sanitario, con lo que la cifra no oficial de víctimas sería de 43 y la oficial, de 40.
Algunos medios aseguran que no quedan más desaparecidos, pero según Zanut los equipos de rescate seguirán buscando “para asegurarse de que realmente se trata de la cifra final de fallecidos”. Toda Italia vive hoy una jornada de luto y en Génova, en el norte del país, se celebró un funeral público por 18 de las víctimas mortales.
Las familias de otros 20 de los fallecidos no asistieron al acto, bien por su indignación con las autoridades o porque prefieren funerales privados. “El mundo entero mira a Génova, en un gran abrazo de emociones, cariño y esperanza”, dijo el arzobispo Angelo Bagnasco durante el servicio religioso.
El primer ministro italiano Giuseppe Conte junto a los familiares de las víctimas de Génova. Foto: EFE
“El viaducto colapsó (…) pero Génova no abandonará: el espíritu de esta gente (…) seguirá luchando como en ocasiones anteriores”, añadió. El funeral, celebrado en un pabellón de exposiciones, fue interrumpido por aplausos cuando se leyeron los nombres de las víctimas.
También hubo plegarias musulmanas para dos víctimas albanesas. Los asistentes recibieron también con aplausos al ministro de Interior, Matteo Salvini (de la ultraderechista Liga), al viceprimer ministro, Luigi Di Maio (del populista Movimiento Cinco Estrellas) y al presidente Sergio Mattarella, que participaron en el acto.
Asimismo hubo aplausos para los bomberos presentes y para los integrantes de los dos principales equipos de fútbol de la ciudad, el Genoa y la Sampdoria. Estos pudieron asistir gracias a que la Liga italiana aplazó los partidos que tenían que jugar este fin de semana.
Decenas de vehículos cayeron al vacío desde una distancia de 45 metros al desplomarse el martes durante una tormenta un tramo de unos 180 metros del puente de Polcevera, también conocido como puente Morandi, que une el oeste con el este de Génova.
Los expertos sospechan que el derrumbe fue causado por una rotura en uno de los cables de suspensión del puente. El primer ministro del país, Giuseppe Conte, inició el viernes un procedimiento para revocar la licencia a Autostrade per l’Italia, la compañía privada encargada de la gestión del puente y que niega haber cometido una negligencia.
La compañía rechazó hoy responsabilizarse del derrumbe, ya que todavía se están investigando las causas de lo ocurrido. “Creemos que no hay condiciones para asumir responsabilidades por un hecho que todavía tiene que ser esclarecido”, dijo en rueda de prensa Giovanni Castelluci, director ejecutivo de la empresa.
Castelluci pidió disculpas por no haber mostrado suficiente compasión con las víctimas. Además, prometió ayuda para las familias y para las personas que tuvieron que abandonar sus viviendas. Según el director de Autostrade, la empresa podrá construir un nuevo puente en ocho meses, una vez que se hayan concedido los permisos.